La 52° Asamblea General de la OEA tiene como lema “Juntos contra la desigualdad y la discriminación”, principio relacionado con grupos en vulnerabilidad como pueblos indígenas, mujeres y personas LGTBI.
Este miércoles 5 de octubre iniciará la 52° Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) en Lima, cuya agenda estará regida por los principios de la igualdad y no discriminación que según los Estándares Interamericanos contempla grupos en situación de vulnerabilidad como pueblos indígenas, mujeres, migrantes, niños, niñas y adolescentes, personas gays, bisexuales, lesbianas, trans e intersex (LGBTI), personas con discapacidad, entre otros.
El evento, que retoma la presencialidad tras dos años de pandemia, se extenderá hasta el día viernes 7 de octubre. Según mencionó en conferencia de prensa el ministro de Relaciones Exteriores, César Landa, se buscará también priorizar decisiones en favor de la seguridad alimentaria, la recuperación de un sistema de salud inclusivo y resiliente, y la gobernabilidad democrática de nuestros países.
Desde la cancillería, se resaltó que el liderazgo del Perú en la región es ampliamente reconocido, ya que aquí nacieron varias de las principales iniciativas que hoy conforman parte sustancial del sistema interamericano, como la Carta Democrática Interamericana, cuya finalidad es defender y promover la democracia en la región.
El evento tendrá lugar en el Centro de Convenciones y será inaugurado por el presidente de la República, Pedro Castillo. Iniciará a las 9 am del 5 de octubre y la clausura está pensada a las 19 horas del viernes.
Amnistía Internacional y su petición a la Asamblea
En el marco de este evento, la Amnistía Internacional emitió una carta abierta a los y las jefas de Estado de los miembros de la OEA en el que hizo hincapié a las brechas en materia de igualdad que se profundizaron a raíz de la pandemia.
Es importante señalar que entre los factores de riesgo que se mencionan en el Compendio de Igualdad y no Discriminación, de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la OEA, se menciona que “grupos como los de las personas LGBT también son extremadamente vulnerables a la violencia y discriminación (…) En muchas partes del mundo, incluyendo en el continente americano, las personas LGBT experimentan graves abusos contra sus derechos humanos y otras formas de persecución debido a su orientación sexual y/o identidad de género real o percibida”.
Además, Amnistía Internacional hizo un señalamiento con respecto a la violencia de género a la que son expuestas las mujeres migrantes. “Las mujeres venezolanas son reiteradamente objeto de agresiones y violencia sexual en los espacios públicos, tanto en las ciudades de acogida donde viven, como en la ruta migratoria. Los pasos fronterizos irregulares son espacios de violencia contra las mujeres refugiadas venezolanas por parte de grupos armados organizados, mientras que otras son captadas para fines de explotación laboral o sexual desde Venezuela” se lee en la carta mencionada.
Por último, también se hizo mención de la importancia de un acceso a la salud inclusivo e igualitario como parte de la creación de condiciones óptimas para la garantía y protección de derechos humanos: “El derecho a la salud también implica el acceso al agua potable limpia, alimentación, etc. En el continente americano aún existen lugares donde el acceso al agua potable limpia es relativamente bajo, particularmente en comunidades rurales. Lo anterior, sumado a una inversión y desempeño insuficiente en materia de derechos económicos sociales y culturales, contribuyeron a una mayor mortalidad del Covid-19“.
