Cada segundo domingo de mayo Petroperú felicita a las mujeres por el Día de la Madre, les agradece por el esfuerzo y compromiso con el país. Sin embargo, el 22 de diciembre del 2021, decidió no renovar el contrato a Yasmin Flores, una madre trabajadora que se encontraba en pleno descanso post natal, mediante un audio de WhatsApp. Ahora atraviesa un proceso judicial en contra de la empresa
Por Ghiomara Rafaele
Yasmin empezó a trabajar en el proyecto del Nuevo Terminal Ilo de Petroperú en diciembre del 2020. Sus funciones como Supervisora de Monitoreo y Control iban desde verificar los parámetros, contratar, comprar bienes y/o servicios hasta vigilar las acciones vinculadas al proyecto. Al principio, como cuenta Yasmin, todo transcurría con normalidad. Cada cierto tiempo viajaba a Moquegua a contrastar el avance.
En el mes de mayo, Yasmin se entera de su embarazo. Su condición no le impidió seguir trabajando, por el contrario, esto le motivó dado que ahora su familia tendría un integrante más. Al inicio de su contrato laboraba en un horario mixto, pero cuando le comunica a Petroperú acerca de su gestación, la empresa estatal lo modifica a remoto debido al contexto pandémico.
El derecho de toda trabajadora gestante consiste en poder acceder a un descanso pre y post natal, cada uno de 49 días que pueden ser usados como mejor le convenga a la trabajadora. Gracias a esta ley, miles de mujeres se encuentran protegidas de despidos arbitrarios y pueden descansar después de haber albergado por 7, 8 o 9 meses a otro ser. Por eso, Yasmin tomó la decisión de usarlos en conjunto después de dar a luz en el mes de octubre.
“Cuando se enteran de mi embarazo me citan a una reunión, no sabía de qué se trataba. En tres reuniones seguidas me preguntaron por mi plan de lactancia. Empecé a sentirme incómoda y hostigada por las constantes preguntas sobre el mismo tema. En el último llamado me dijeron que estaban viendo complicada mi renovación de contrato porque querían cambiar el régimen”, cuenta Yasmin.
El despido definitivo le llegó por un audio de WhatsApp de 4 minutos y 2 segundos. En dicho audio se escucha, según la demanda presentada ante el Poder Judicial, al Jefe de Proyectos de Inversión, Luis Rivera, comentarle que «el Gerente General, en teoría se le entendió, que no quería que se renueve a ninguna persona. Tiene la idea, creo yo errónea, de que fueron por la anterior administración». Esa fue la única información que se le brindó a Yasmín
Estás acciones por parte del personal de Petroperú generaron en Yasmín una incertidumbre sobre el futuro económico en casa, causándole un cuadro de estrés. En el mes de octubre nace su hija por lo que su periodo de descanso inicia el 4 de octubre y culmina el 9 de enero del 2022. A pesar de que su contrato culminó en diciembre, la ley la protege, tal como lo indica la abogada laboralista Gisela Figueroa.
“El Artículo 6 de la Ley 30709 prohíbe el despido y no renovación de contrato por motivos vinculados a la condición de embarazo o lactancia. Establecido también en el Convenio OIT 183 enfocado en proteger a las gestantes o madres trabajadoras”.
Proyecto Nuevo Terminal Ilo
Uno de los recursos más necesarios a nivel mundial es el petróleo. Algunos países cuentan con reservorios propios y pueden explotarlos para el beneficio de su población. Uno de esos es el de Ilo, Moquegua. Por ello, para extraer la materia prima es necesario contar con tecnología, la fuerza e inteligencia humana. En el proyecto Nuevo Terminal Ilo, laboraba Yasmin, que hasta el momento no ha culminado, y según el último informe del 2022 de Petroperú recién va a un 33%.
En el primer contrato firmado con Petroperú se estableció un plazo de seis meses, a pesar de ello, no se culminaron las actividades, por lo que se decidió ampliar el contrato por otro periodo de seis meses. Y es que Yasmin era competente para el puesto y esto lo sabía Petroperú que había decidido contratarla debido a que ya había demostrado capacidad cuando fue practicante en la refinería estatal.
Más y más vulneración
Según Yasmín no fueron los únicos derechos vulnerados por Petroperú en contra de ella. En el mes de febrero los denunció ante la Sunafil debido a que no le pagaron completamente los meses en los que se encontraba en pleno descanso pre-post natal, vulnerando una vez más los derechos de esta madre trabajadora.
Además, debido al despido en su periodo de descanso postnatal, Yasmín decidió iniciar un proceso judicial el 4 de enero del 2022 en contra de Petroperú, en el que no solo demanda a la refinería peruana por el despido discriminatorio sino por la desnaturalización de su contrato. Hasta el momento, un año después, la Corte Superior de Justicia de Lima aun no emite un veredicto.
Según la defensa de la extrabajadora, Yasmín realizaba “funciones de actividades habituales, necesarias, regulares e indispensables para el logro del objeto de la empresa y que tipificaban indiscutiblemente la existencia de labores claramente ordinarias y permanentes”, y debido a ello se estaba vulnerando sus derechos al ofrecerle un contrato temporal.
Wayka se buscó contactar con Petroperú, quienes declararon no haberle renovado el contrato a Jasmin debido a que la gerencia usuaria no lo solicitó y por la finalización del periodo contractual. Finalmente, descantan que «Petroperú haya incumplido con otorgarle los beneficios que le correspondían mientras mantuvo el vínculo laboral con la empresa».
Hasta el momento Yasmín no consigue justicia, no solo tuvo que atravesar un despido a los meses de dar a luz, sino un proceso judicial que sigue en curso y parece nunca acabar por las trabas de Petroperú.