La vida de Jeddy Ríos cambió desde que sufrió un accidente laboral en Adecco. Pide apoyo a las autoridades.
Claudia Risco
Jeddy Ríos permanece en cama la mayor parte del tiempo. Así se lo recomendó el doctor tras la operación de columna a la que fue intervenido. La radiografía que se realizó determinó que padecía de hernia discal lumbar y rotoescoliosis, la primera aprieta fuerte la raíz nerviosa y produce un intenso dolor, mientras que la segunda hace que Ríos sufra una serie de dolores continuados encima de los huesos de la cadera. El hombre de 37 años tiene que tomar calmantes para el dolor cada 12 horas, por la mañana y por la noche. Todo empezó cuando ingresó a trabajar como auxiliar de almacén en la empresa multinacional Adecco. Esta es su historia.
Jeddy se emocionó cuando logró quedarse con el puesto de auxiliar en Adecco. Era octubre del 2021, un año antes se había licenciado en Ciencias de la Comunicación, sin embargo, no encontraba trabajo en lo que había estudiado. Por eso su ingreso a Adecco fue la promesa cumplida de un sueldo estable.
Su función en Adecco era mover y transportar paquetes de gran tamaño. El horario era de 7:00 pm a 5:40 de la mañana. Es un trabajo calificado de riesgo alto. Es necesario usar una faja lumbar para realizarlo, sin embargo, la empresa no le brindó este implemento. Esa fue la primera de una serie de negligencias que se cometieron contra Ríos.
Al poco tiempo de haber ingresado a trabajar, Jeddy sufrió una primera caída. El supervisor le pidió que baje una de las cajas, es en ese momento que se tropezó y se golpeó la columna. En lugar de dar aviso al personal de seguridad y solicitar atención médica para el trabajador, el supervisor le pidió que se pare rápido. Ese accidente debió ser reportado, pero no sucedió así. Desde ese día, Jeddy empezó a tomar pastillas para el dolor que costeaba por su cuenta. Lo peor vendría después.
“Había dolor, inclusive como le digo hay una marca del golpe, se ve un rayón, una cicatriz”, comenta Jeddy sobre su primera caída.
No pasó ni un mes del siguiente accidente laboral. El 11 de noviembre , Jeddy continuaba con sus labores como auxiliar de almacén, cuando intentó levantar una caja de gran tamaño, sintió un fuerte dolor en la espalda que lo obligó a soltar el paquete, cae al suelo, sus compañeros lo ayudan a levantarse. Le informó a su supervisor. En ese momento no se podía parar por el dolor. Pese a que expresó su malestar, el supervisor lo acompañó tres horas después al Seguro Integral de Salud (SIS) debido a la insistencia de Jeddy.
En el SIS ordenan dos días de descanso. El doctor le recomendó que se hiciera una radiografía, sin embargo, el supervisor se negó. Sólo le dieron dos días de descanso médico. “El supervisor no me ayudó, me acusaba de haber levantado mal la caja, yo hice bien, vamos a ver las cámaras«, cuenta Jeddy que fue su respuesta.
El dolor sólo aumento después de su visita al SIS, va a otra clínica para atenderse, es ahí cuando se da cuenta que la empresa no había activado el Seguro Complementario de Trabajo de Riesgo (SCTR), Recién lo hacen el 17 de noviembre, dos meses después de que Jeddy ingresa a trabajar. En por esa fecha que por fin puede hacerse una radiografía.
“Entre esos días la lesión se iba agravando, el muslo lo tenía adormecido, no lo sentía, sentía que cuando me ponía erguido de la espalda hasta la rodilla sentía una línea de dolor, todo el muslo hasta la rodilla, no podía hacer nada, me paraba erguido y ahi quedaba, tenía que estar inclinado”, relata Jeddy.
A Jeddy lo trasladan a Emergencia. Mientras se encuentra internado, representantes de Adecco le solicitan que firme un contrato, el cual cambiaba su modalidad de planilla a locación de servicios. Además, el documento establecía que la empresa podía dejar de requerir los servicios de Jeddy cuando ellos deseen. Le dijeron que si no firmaba no se iban a hacer cargo de sus gastos.
La negativa de Jeddy fue respondida con una desvinculación laboral. A los pocos días iba a ser operado para recibir una prótesis de columna. La empresa optó por dejarlo a su suerte. La operación fue pagada gracias a la ayuda de varios familiares de Jeddy, el monto ascendió a 30.000 soles. Si es que no lo operaban podría haber quedado parapléjico sin movilidad en las piernas.
Jeddy presentó su caso ante la Sunafil, sin embargo, la inspectora falló a favor de Adecco, no le tomaron la declaración a Jeddy, ni tampoco revisaron las cámaras donde se ve el accidente. Indicaron que no era necesario. La Sunafil no respondió nuestras preguntas hasta el final de esta nota.
Jeddy ha expuesto su caso en redes sociales, desde ahí solo recibe cartas notariales de parte de Adecco, donde le piden que se rectifique. Es la única comunicación que tienen.
“Me encuentro preocupado por el dinero, debo cubrir las deudas, medicamentos, vitaminas y terapias que me indique el doctor. Lamentablemente, no tengo ningún ingreso de momento. Adecco debería ser más humano, los trabajadores no somos máquinas desechables, estoy reclamando un derecho, las personas necesitan tener una buena salud y una vida digna, no pueden estar haciendo eso”, refiere Jeddy.
Nos comunicamos con representantes de Adecco Perú y niegan que no quieran hacerse cargo. “Se cubrieron todos los gastos, pero Rios ya no quiso renovar el contrato. Sobre la operación, Rímac Seguros, la empresa aseguradora, determinó que el Servicio Complementario de trabajo de Riesgo no procedía por ser una enfermedad preexistente que Jeddy no declaró en la ficha médica antes de ingresar a trabajar”, sostiene la empresa.
Jeddy califica de indignante la respuesta de Adecco. «Yo he ingresado en perfecto estado de salud, me hicieron exámenes médicos y no encontraron ninguna irregularidad. Sólo están dilatando el proceso«, comenta.