Redacción Wayka
El cine peruano acosado nuevamente por la censura. Desde la bancada de Renovación Popular, la congresista Milagros Jáuregui de Aguayo envió un oficio a la titular del Ministerio de Cultura para “trasladarle el malestar ciudadano” sobre la película “Un romance singular” de Wesley Verástegui por supuesta discriminación religiosa. La película cuenta la historia de una relación entre una mujer trans y un joven evangélico.
El pasado 12 de enero, la parlamentaria Jáuregui de Aguayo envió una carta a la ministra de Cultura, Gisela Ortiz Perea. “En el desarrollo de dicha película se hace mención de manera despectiva y negativa a los creyentes evangélicos, lo cual promueve notoriamente la discriminación religiosa y fomenta el odio y estigma a una creencia religiosa”, dice el oficio.
Para Mónica Delgado, crítica de cine y docente de la Universidad Mayor de San Marcos (UNMSM), la carta enviada por la congresista de Renovación Popular es un amago de censura. “Es un amedrentamiento, harán que películas similares piensen dos veces antes de postular a un recurso porque hay personalidades de la política que se vuelven los máximos interpeladores de la libertad de expresión y creación”.
“Esta carta tiene las formas de un tipo de coacción”, agrega Delgado.
En la carta, la congresista Jáuregui también solicitó información sobre el presupuesto público asignado para la realización y difusión de la película. Cabe recordar, en este punto, que “Un romance singular” no se realizó con fondos públicos.
“Esta película de Wesley Verástegui obtuvo 70 mil soles en un proceso de asignación de recursos anuales del 2021, pero eso no implica que haya sido hecha con recursos públicos. Obtuvo esos recursos para la distribución, porque de otra forma, sin ese estímulo la película no llegaría a salas”, aclara Mónica Delgado en entrevista para Wayka.
Anteriormente, congresistas de partidos aliados a Renovación Popular también han intentado establecer algún tipo de censura sobre el cine peruano. La exparlamentaria María Melgarejo, de Fuerza Popular, presentó en 2018 un proyecto de ley que proponía no apoyar económicamente las películas que “incurran en presunta apología al terrorismo”.
En 2020, a propósito del estreno del documental “Hugo Blanco, río profundo”, que narra un periodo de la reforma agraria a partir de la figura del exguerrillero Hugo Blanco, el exparlamentario Daniel Urresti también propuso una ley de cine peruano en el mismo sentido. “Si los terroristas, sus seguidores o simpatizantes quieren hacer películas que lo hagan con su plata, no con la plata de nuestros impuestos”.
