Idubis Trujillano Bustamante (36) recibió cadena perpetua por el delito de violación sexual; sin embargo, la denuncia por homicidio de la menor fue archivada. Abogado de la familia materna sostiene que habría el sentenciado no habría actuado solo.
Redacción Lambayeque
En una audiencia virtual realizada el 27 de diciembre, la jueza Ingrid Janet Merino Gonzales, presidenta del Segundo Juzgado Penal Colegiado de Chiclayo, dictó cadena perpetua contra el expolicía Idubis Trujillano Bustamante por el delito de violación sexual en contra de su menor hija de 12 años, quien murió con ocho meses de embarazo en enero de este año. Sin embargo, al sentenciado no se le atribuyó la responsabilidad de la muerte de la niña. Wayka alertó del caso en febrero de 2022.
Esta audiencia fue un adelanto de fallo, puesto que la prisión preventiva de Idubis está a punto de vencer. La lectura integral de la sentencia se llevará a cabo el 9 de enero de 2023. El juzgado también dispuso que el sentenciado pague S/ 5000 por concepto de reparación civil.
«Idubis solo ha sido sentenciado por el delito de violencia sexual, mas no por el delito de parricidio, debido a que no se ha encontrado aún evidencia suficiente. Después de casi un año hemos encontrado justicia, pero aún tenemos que encontrar elementos de investigación para demostrar que Trujillano también causó la muerte de su hija «, señaló para Wayka, Darwin Santacruz, abogado de la familia materna de la niña. La tesis de la defensa argumenta que el expolicía, recientemente sentenciado, no habría actuado solo.
Como se recuerda, Trujillano cumplía prisión preventiva en el penal de Picsi desde el 26 de abril, después que se apersonó a la Comisaría de Atusparias, del distrito chiclayano de José Leonardo Ortiz. El denunciado no se presentó a las tres citaciones en el Instituto de Medicina Legal de Chiclayo para realizarse la prueba de homologación de ADN con el feto de su fallecida hija.
Una vez realizada dicha prueba, el 4 de mayo, los resultados fueron determinantes para la investigación.
«El resultado de la homologación de ADN, realizado con muestras de sangre del feto y restos óseos de la menor, ha sido fundamental para la sentencia, pues el resultado fue de 99.9%. Además, Trujillano confirmó en sus declaraciones que dormía con su hija, que la aislaba, que retiro a sus hijos», explica el abogado.
NECROPSIA CONFIRMÓ VIOLACIÓN
El resultado preliminar de la necropsia determinó que la menor falleció a causa de un edema cerebral y congestión multivisceral. El informe final recién fue emitido la quincena de abril, una semana antes de la captura de Idubis. Los resultados arrojaron que la menor tenía desgarros vaginales antiguos, lo que confirmó la violación. Es así que la necropsia fue fundamentale para que el Juzgado Colegiado decida por unanimidad la cadena perpetua contra Trujillano.
SOBRE EL CASO
Según el reporte policial del lunes 3 de enero al promediar las 6 de la tarde, el cuerpo de la menor llegó sin vida al centro de salud. Fue Idubis Trujillano, quien la trasladó en una mototaxi.
Personal médico de la posta registró que el cuerpo de la niña no presentaba heridas ni signos de violencia y llevaba fallecida entre 5 y 7 horas, es decir desde el mediodía. El feto tampoco tenía signos vitales.
Trujillano, quien vivía con la menor y sus otros dos hijos menores de 8 y 5 años, no avisó a sus familiares sobre el embarazo y la muerte de su hija. Decidió velarla en la vivienda que alquilaban. Familiares maternos de la menor llegaron hasta el lugar para exigir que los hechos sean investigados y la violencia contra la niña no quede impune. Pese a que el fiscal Mario López desestimó la necropsia, la insistencia de los familiares maternos logró que el cuerpo de la niña sea llevado hasta la morgue de Chiclayo.
