Mientras que el expresidente Alberto Fujimori deberá afrontar el proceso penal en tanto se espera la ampliación de su extradición por el caso esterilizaciones forzadas, la situación de Alejandro Aguinaga en el Congreso también toma su rumbo.
Por Álvaro Meneses
Tras ser incluido en el proceso penal por las esterilizaciones forzadas que el gobierno de Alberto Fujimori aplicó a miles de mujeres quechuahablantes contra su voluntad y con engaños, según la denuncia del Ministerio Público, el congresista Alejandro Aguinaga ha dejado de presidir e integrar la Comisión de Fiscalización y Contraloría del Parlamento. La posibilidad de una sanción o suspensión en su contra, sin embargo, depende de que no realice conductas o declaraciones referidas al caso.
El pasado sábado 11 de diciembre, en el marco del caso esterilizaciones forzadas, el magistrado Rafael Martínez Vargas, a cargo del Juzgado Penal Especializado en Crimen Organizado, resolvió abrir proceso penal e iniciar con la investigación judicial contra el expresidente Alberto Fujimori y sus exministros de Salud, Eduardo Yong Motta, Mariano Costa Bauer y Alejandro Aguinaga por el presunta autoría mediata del delito de lesiones graves seguidas de muerte.
Mientras que el expresidente Fujimori deberá afrontar el proceso penal mientras se espera la ampliación de su extradición por el caso esterilizaciones forzadas, la situación de Alejandro Aguinaga en el Congreso también toma su rumbo.
De acuerdo al artículo 20 del Reglamento del Congreso, un parlamentario comprendido en procesos penales no puede integrar las comisiones de Fiscalización y Contraloría, de Ética Parlamentaria, ni la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales. Por lo que Fuerza Popular retiró esta mañana a Aguinaga de la presidencia de la Comisión de Fiscalización y lo reemplazó por el congresista Héctor Ventura.
Por su condición de procesado penal, al Congreso no le corresponde iniciar alguna acción o sanción sobre Aguinaga hasta que el Poder Judicial emita una sentencia condenatoria en su contra. En ese caso, tras la eliminación de la inmunidad parlamentaria, la sentencia no necesitaría ser debatida y aprobada en ninguna comisión ni en el Pleno del Parlamento, sólo admitida por el Consejo Directivo como parte de un procedimiento formal.
El único escenario en donde una sanción podría recaer sobre Alejandro Aguinaga es en caso de que el fujimorista realice conductas o declaraciones referidas al caso esterilizaciones forzadas que vayan en contra de la ética parlamentaria.
“En caso de que el señor Aguinaga haga expresiones con respecto a las víctimas de las esterilizaciones forzadas, a la Comisión de Ética le correspondería suspenderlo de sus funciones por 120 días. Antes ya se ha expresado mal de las agraviadas, siempre está saliendo en los medios de comunicación a denostar el caso, a minimizar los actos, cuando para la justicia es materia de investigación”, dice Juan José Quispe, abogado del Instituto de Defensa Legal (IDL).
Cabe recordar, además, que en una entrevista televisiva Alejandro Aguinaga calificó de “quejosas” a las mujeres quechuahablantes que fueron esterilizadas en su contra, con engaños, graves lesiones y muertes.
En ese sentido, el excongresista Lenin Bazán Villanueva coincide en que ese es el único escenario que podría terminar en una sanción o suspensión sobre Alejandro Aguinaga. “No le pasaría nada salvo que producto de este proceso penal, Aguinaga tenga un comportamiento que viole la ética parlamentaria, como por ejemplo que se aproveche de su cargo y cometa injerencia en el Poder Judicial o el Ministerio Público, o que como congresista pida información sobre su caso”, explica Bazán a Wayka.
