Organizaciones feministas rechazan que el Congreso haya propuesto que la sesión del voto de confianza del gabinete de ministros se realice el 8 de marzo, misma fecha del ‘Día Internacional de la Mujer’. 

Por Andrea Morales.

«La presidenta del Congreso ha señalado como fecha el 8 de marzo, nosotros aceptamos la fecha propuesta por el Congreso», confirmó el premier Aníbal Torres el pasado 16 de febrero. 

Así, Legislativo y Ejecutivo acordaron que la sesión para la aprobación o no del cuarto gabinete de ministros del presidente Castillo se daría el 8 de marzo.

Ante ello, organizaciones feministas se manifestaron en contra pues el 8 de marzo es el ‘Día Internacional de la Mujer Trabajadora’, fecha emblemática y de reflexión para las mujeres en el globo.

“Sesión para voto de confianza no puede realizarse el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer Trabajadora y fecha emblemática para la lucha y reivindicación de nuestros derechos”, aservera la organización Manuela Ramos en un pronunciamiento publicado en sus redes sociales.

Al respecto, Rocío Gutiérrez, subdirectora de esta organización explica: “Siendo el #8M una fecha emblemática para las mujeres en la que el Estado debería dar cuenta de los avances en relación a derechos de las mujeres, rechazamos que se pretenda presentar el gabinete con la presencia de ministros con denuncias por violencia hacia las mujeres”.

Tal es el caso de los ministros José Gavidia, titular del Ministerio de Defensa, y Juan Silva, ministro de Transporte y Comunicaciones. De la misma forma, Gutiérrez critica al Congreso:

“Por otro lado, rechazamos que el congreso pretenda instrumentalizar la fecha #8M para cuestionar al gabinete por las mismas razones (denuncias por violencia hacia las mujeres) cuando el mismo Congreso presenta proyectos de ley para restringir derechos sexuales y reproductivos”, aseguró la subdirectora de Manuela Ramos.

Por su parte, el Centro de Promoción y Defensa de los Derechos Sexuales y Reproductivos (PROMSEX) también manifestó su rechazo.

“Consideramos que es una burla porque, por un lado, no toma en cuenta que ya se había programado el pleno mujer, dedicado a la aprobación de proyectos específicos para las mujeres, pero también por el hecho que el gabinete tenga entre sus integrantes personas que están acusadas de violencia o tienen en su entorno de confianza a perpetradores de violencia”, denuncia Susana Chávez, directora ejecutiva de Promsex.

Igual que la representante de la organización feminista Manuela Ramos, Susana Chávez de Promsex rechazó la actitud y la agenda del Legislativo. “El Congreso en este momento está siendo una amenaza para los avances que se han logrado en términos de  lucha contra la violencia hacia las mujeres. Lejos de fortalecer la igualdad de género, hay proyectos nefastos como el PL 904 que atenta contra la calidad educativa con el único fin de eliminar la educación sexual integral en los colegios”.