Un sondeo realizado a nueve poblaciones indígenas de Loreto y Ucayali reveló que el 66.2% de personas no quiere vacunarse contra la COVID-19. Esto debido a la falta de información de parte del Gobierno sobre la vacuna y el proceso de inmunización. Las comunidades indígenas son unas de las poblaciones más vulnerables ante la crisis sanitaria, pero hasta ahora no hay un plan de vacunación intercultural.
La encuesta se realizó a 462 ciudadanas y ciudadanos indígenas y fue llevada a cabo por la Organización Regional de los Pueblos Indígenas del Oriente (ORPIO) y la Organización Regional AIDESEP Ucayali. El estudio también revela que hay un grave desconocimiento sobre cuestiones relacionadas al COVID-19. El 67.3% no sabía que podía reinfectarse con el virus y el 29.2% toma medicamentos sin receta ante la sospecha o confirmación de contagio.
“Hace falta escuchar la verdadera voz de los pueblos indígenas, ir comunidad por comunidad para preguntarnos, para informarnos, muchos no quieren vacunarse porque temen morir y no es un prejuicio, es una realidad ante tanta desinformación que el Gobierno peruano no resuelve” , enfatizó el presidente de ORPIO, Jorge Pérez.
Si bien los pueblos indígenas fueron incorporados en la segunda fase de vacunación, aún no hay fecha exacta de la llegada de las vacunas a las comunidades. Hasta el momento, algunos adultos mayores de 80 años de identidad indígena han sido inmunizados. Sin embargo, no existe un plan de enfoque intercultural que gestione la vacunación de los pueblos originarios a totalidad ni información en lenguas nativas.
«Si el Ministerio de Salud (Minsa) y la Dirección Regional de Salud van a realizar una campaña de información se debe tener en cuenta la participación de los pueblos indígenas. Sus campañas no pueden realizarse a ciegas», agregó Pérez. De la misma forma, el presidente de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana, Lizardo Cauper, señaló que el Minsa debe procurar que la información sea oportuna y pertinente.