Lucero Ascarza
De forma anónima, diversos padres de familia del Liceo Naval “Almirante Guise” expresaron su preocupación. Alfredo Draxl, nuevo director de la institución, ha sido acusado de haber maltratado física y psicológicamente a menores cuando era miembro del Sodalicio.
Este miércoles 20 de marzo, el ex miembro del Sodalicio de Vida Cristiana (SVC) Alfredo Draxl prestó testimonio ante la Comisión Investigadora de los Abusos Sexuales contra Menores de Edad en Organizaciones del Congreso de la República.
Ese mismo día, se difundió en redes sociales que el ex sodálite había sido designado este año como director del Liceo Naval “Almirante Guise”. A la par, los padres de familia que tienen hijos en este colegio compartieron su preocupación, sin querer revelar sus nombres.
Después de todo, no es la primera vez que se cuestiona la presencia de Alfredo Draxl en una institución educativa luego del escándalo de las denuncias contra el Sodalicio.
El miedo de los padres
A fines de 2015, Draxl abandonó la dirección del Colegio San Pedro, parte de la Red de Colegios Sodálites, frente a una demanda de padres de familia. El reclamo era no haber recibido información sobre las acusaciones de abuso que pesaban sobre algunos miembros del colegio.
En el sustento para su demanda, los padres argumentaron que a Draxl “se le indicaba como una persona muy cercana al señor Figari, y como formador que cometió abusos”. También se advertía la vinculación del colegio con otros miembros del Sodalicio: Gonzalo Len Álvarez (hombre de confianza de Luis Figari), Jaime Baertl y Jeffery Daniels (acusado de abusos sexuales).
En sus descargos, la Asociación Civil Santa María, promotora del Colegio San Pedro, señaló respecto a Draxl que «no se habían comprobado los hechos que le imputaban, siendo estos, en su gran mayoría, de hace más de treinta (30) años». Además, que «resultaba injusto sostener que los alumnos del Colegio podrían encontrarse expuestos a una situación de inseguridad, toda vez que los profesores eran elegidos por su competencia personal y profesional, y no por sus vínculos con el SVC».
Pese a ello, la resolución final de la Sala Especializada en Protección al Consumidor del Tribunal de Indecopi declaró fundada en parte la demanda de los padres, «al haber quedado acreditado que, durante el proceso de admisión de los menores hijos de los denunciantes, no brindó información sobre los cuestionamientos referidos a los presuntos abusos que habrían cometido algunos miembros del Sodalicio de Vida Cristiana«.
Así, la Asociación Civil Santa María tuvo que devolver a los denunciantes las cuotas de ingreso pagadas para la admisión de sus hijos.
Con ese antecedente, resulta cuestionable que la Marina de Guerra, entidad a cargo de la administración del Liceo Naval «Almirante Guise», haya elegido designar a Alfredo Draxl como director.
Ese también es el parecer de una madre de familia que compartió de forma anónima su testimonio: «Algunas personas pueden creer que se ha ‘reformado’. Los abusadores no se reforman pero aún cuando así fuera, yo no estoy dispuesta a que ‘haga la prueba’ con niños reales entre los cuales está mi hijo».
Como ella, otros padres han expresado su preocupación. Sin embargo, ninguno quiere hacerlo de forma directa, por temor a exponers a sus hijos a represalias.
Las acusaciones
El origen de las denuncias contra Alfredo Draxl se encuentra en el 2000, año en que José Enrique Escardó empezó a publicar columnas sobre el ex formador sodálite en su blog “El quinto pie del gato”. Como alguien que fue miembro del Sodalicio en su adolescencia, Escardó compartió su testimonio sobre los castigos y el trato que recibían los menores.
Los hechos que describe habrían ocurrido en 1987, durante el tiempo que pasó en la comunidad sodálite San Aelred. Años anteriores, Alfredo Draxl había sido su profesor en el colegio Markham.
Además del incidente con la cuchilla suiza, Escardó ha narrado las humillaciones, golpes y otros castigos físicos que Draxl habría aplicado con él y sus compañeros. Uno de ellos fue hacerlo dormir en una escalera por un mes, sin más que una frazada para cubrirse; vivir con solo lechuga y agua y privarse de dormir, estando de pie, por una semana.
Fue a raíz de esos testimonios brindados por Escardó en más de una década, que la comisión investigadora que preside el congresista Alberto De Belaúnde lo invitó a declarar en febrero.
Hace tres días, esta comisión citó también a Draxl. Ahí este declaró que «al conocer informaciones de abusos sexuales a menores, identificaba a la persona afectada y los contactaba con el psicólogo». Pero no se conoce su respuesta sobre los abusos físicos y psicológicos denunciados por José Enrique Escardó.
La respuesta del Minedu
Una vez difundida la noticia de que Alfredo Draxl era el nuevo director del Liceo Naval «Almirante Guise», el reclamo de diversos ciudadanos llevó al Ministerio de Educación (Minedu) a dar una declaración. Primero, que este liceo no estaba bajo su administración. Segundo, que había solicitado al Poder Judicial verificar si Draxl tenía sentencia o condición de procesado.
La respuesta será que no. Alfredo Draxl no fue incluido en la denuncia previa hecha contra miembros del Sodalicio de Vida Cristiana, al estar estos dirigidos principalmente contra acusados por abuso sexual.
Pero con el precedente de la resolución de Indecopi, los padres de familia que tienen hijos en el Liceo «Almirante Guise» pueden pedir a la institución explicaciones. ¿Se les informó previamente sobre las acusaciones que recaen en el nuevo director? Es claro que no.