Familiares de menor víctima de tocamientos alertan que presunto agresor busca desacreditar testimonio en cámara Gesell

El abogado de “Lucía”, una menor que denunció por agresión sexual a su vecino en Piura, asegura que la defensa del denunciado ha señalado que el procedimiento de cámara Gesell, gestionado por el Ministerio Público, tiene irregularidades.

Han pasado tres años desde que “Lucía”, una menor de tan solo 10 años, narró que fue interceptada por Erasmo Aguilera Ulloa, quien realizó tocamientos indebidos contra ella a pocos metros de su casa. Desde entonces, tanto ella como su madre iniciaron un proceso judicial que continúa sin ser resuelto, y que, según su abogado, ahora se encuentra en peligro por una presunta irregularidad que alega la defensa del denunciado. 

Santiago Gastañadui, abogado de la menor, comenta que intentar desacreditar el testimonio de las denunciantes es algo “normal/común” que se espera del abogado de la otra parte, sin embargo, su preocupación es debido a que la la defensa de Aguilera Ulloa está cuestionando el protocolo que se siguió durante la entrevista a la menor en cámara Gesell, así como el informe psicológico, ambos gestionados por el Ministerio Público. 

“Esa entrevista es dirigida por una psicóloga, y al parecer, porque así lo ha denunciado el psicólogo (de parte) del denunciado, no se ha seguido el protocolo,  pero ese es un problema no de la menor, no de la mamá, sino del Ministerio Público, porque el Ministerio Público es el que contrata personal en este caso psicólogos, psicólogas especiales, para que hagan el trabajo, no puede ser posible que el caso se pueda caer por irresponsabilidad del Ministerio Público”, señala enfático el abogado. 

Para la abogada Amire Ortiz, es necesario evaluar cuál es el vicio “que supuestamente no se ha cumplido. Cuál es esa falta a nivel de protocolo. Porque también hay una situación de seguridad jurídica que se tiene que cautelar, sobre todo porque aquí tiene que primar el principio del interés superior del niño, de la niña. En este caso en donde se tiene que prevalecer estos temas que no tienen que ser revictimizantes”.

Ortiz, quien también es directora de la organización Acción por Igualdad, señaló que este tipo de acciones son un acto de “perversión de parte”, y que son estrategias “lamentables que utilizan las partes acusadas para poder limpiarse”.

“Como de repente no existe otras formas en como pueda demostrar la inocencia   lo que está buscando es sabotear por eso a nivel de forma. En este caso sería totalmente revictimizante”, comentó.

La pericia psicológica de la menor señala que sufrió afectaciones emocionales como consecuencia de los tocamientos indebidos. Además, en el informe de la cámara Gesell la menor refirió que el presunto agresor ya había intentado mantener contacto con ella en ocasiones previas, pero su percepción fue que estaba confundiendo las cosas, por lo que no le dio más importancia.

Otras pruebas

Además del propio testimonio de la menor, existen videos de la cámara de seguridad de la casa del denunciado que coinciden con lo contado por la menor. En las cámaras se observa a la menor con sus mascotas en el frontis del domicilio del presunto agresor. 

Según el testimonio de “Lucía”, ella se encontraba paseando a sus animales a unos metros de su casa, justo a la altura  de la casa del denunciado, cuando uno de sus perritos se escapó e ingresó al domicilio del presunto agresor. Cuenta la menor que Erasmo Aguilera, en ese momento de 65 años, le indicó que entrara por su mascota. Ante la negativa de la menor, “Lucia” refiere que él la jaló hacia la casa y perpetró el delito de tocamientos indebidos, tras lo cual corrió en dirección a su domicilio. 

Además de las imágenes, la defensa de la niña cuenta con el testimonio de la abuela de una de sus amigas, con quienes ella estuvo minutos antes de los hechos. La señora narra que vio cuando la menor ingresó al domicilio, sin imaginar lo que ocurriría. 

Esperan que se haga justicia

La mamá de “Lucía” teme que Erasmo Aguilera Ulloa quede absuelto y exige justicia para su hija. “Están tratando de desacreditar lo que mi niña dice. O sea, ¿cómo van a intentar desacreditar una cámara Gesell? ¿Acaso mi niña dijo que pregunten eso? Mi niña simplemente respondió a lo que le preguntaban”, señala indignada.

Además, asegura que tampoco quieren tomar en cuenta los informes de las terapias psicológicas que pasó “Lucia” después de demostrar la afectación causada por la situación de abuso: “No están tomando en cuenta el informe de la Diaconía (Institución del Arzobispado de Piura que brinda terapias psicológicas gratuitas), cuando mi hija fue envíada ahí por la misma fiscalía, por la misma fiscal. Mi hija estuvo en una terapia larga, entonces cómo es posible que no tomen en cuenta ese informe”.

Cabe señalar que la menor y su madre tuvieron que huir de su domicilio, ya que, pese a tener concedidas medidas de protección, el presunto agresor seguía paseando cerca a su casa como si nada, causando que la menor manifieste signos de depresión. 

El abogado Santiago Gastañadui, por su parte, denuncia que la mamá de Lucía no fue asesorada correctamente al inicio del procedimiento, ni se le otorgó un abogado capacitado, por lo que no está constituida como parte civil, es decir, no puede actuar activamente en el proceso, ni ser notificada ni solicitar diligencias relacionadas con el procedimiento penal. “Pero ese no puede ser impedimento para obtener justicia, porque finalmente si el señor cometió un delito debe sancionarse, además que hay pruebas periféricas”, asegura.

Actualmente el procedimiento se encuentra en la etapa de juicio oral y está a cargo de tres magistradas: Carolay Rodriguez, Diana Zapata y Cintia Mory. Tanto la mamá de “Lucia”, como el abogado de la menor, esperan que valoren como es debido el testimonio de la afectada y se haga justicia.