Por Juan Zapata
El Ministerio de Educación (Minedu) ha despedido a 9 promotores de bienestar que ayudaban a 200 alumnos de los colegios de las comunidades asháninkas Quempiri y Potsoteni a continuar con sus clases durante la pandemia.
Ambas comunidades asháninkas no cuentan con televisión o radio para seguir el programa Aprendo en Casa debido a que la señal es pésima e insuficiente.
Por eso, la Central Asháninka del Río Ene (Care) y los docentes de las instituciones iniciaron el plan Korake que consiste en usar las herramientas tecnológicas con la ayuda de los promotores de bienestar que son jóvenes de la comunidad contratados por la Dirección de Servicios de Educación en el Ámbito Rural (Diser) del Minedu.
De esta manera los jóvenes de las comunidades asháninkas trabajan como interlocutores de los docentes y los alumnos. Ellos se encargan de ayudar a los estudiantes a usar las herramientas necesarias para enviar y recibir las indicaciones de los profesores, quienes se encuentran lejos de las comunidades.
Sin embargo, 9 promotores de bienestar de las comunidades Quempiri y Potsoteni fueron despedidos, dejando a 200 alumnos sin la ayuda para poder continuar con sus clases.
Ángel Pedro Valerio, presidente de Care, considera que la decisión del Minedu vulnera la estrategia que habían iniciado para que los alumnos asháninkas no pierdan el año escolar.
Daniel Ávila, director de la Institución Educativa Boca Jose Flores Nijamashi de la comunidad de Quempiri, dice que la decisión de el Minedu genera un mensaje de desánimo para los padres, docentes y alumnos. Él considera que los promotores de bienestar facilitaban el trabajo a distancia. Javier Llanco, director del colegio Boca Potsoteni, pide que se reintegren a los promotores de bienestar para continuar con el plan Korake.
Según la Diser, los promotores de bienestar no realizaban un trabajo prioritario y por razones de presupuesto decidieron despedirlos.
