En el 2019, Luis Gaspar Uribe era juez del Tribunal Eclesiástico y consideró que la acusación contra el excardenal Cipriani por presunta inacción ante casos de abuso no tenía sustento. En la investigación periodística “Mitad monjes, mitad soldados» se documentan las denuncias por abusos sexuales y psicológicos contra Luis Figari que se presentaron al tribunal dependiente del Arzobispado que lideró Cipriani, un religioso ultraconservador y miembro del Opus Dei. Gaspar Uribe también es un vocero «provida» que se opone al enfoque de género.
Por Jair Sarmiento
«Esta denuncia no tiene ni pies ni cabeza, buscan notoriedad, publicidad, porque no están informados. Aquí nadie ha intentado encubrir ni ha tratado de tapar estos hechos», decía el padre ayacuchano Luis Gaspar Uribe en el 2019, en el programa Diálogo de Fe de RPP, para rechazar las acusaciones que tuvo el excardenal ultraconservador Juan Luis Cipriani por no actuar frente a tres denuncias de abuso sexual contra el fundador del Sodalicio Luis Fernando Figari que llegaron en el 2011 al Tribunal Eclesiástico, un órgano dependiente del Arzobispado de Lima.
El nombre del pastor Luis Gaspar Uribe volvió a resonar en estos días ya que fue el religioso que acudió a la casa de la familia del dictador y genocida Alberto Fujimori para brindar el sacramento de la unción de los enfermos. Luego fue quien dirigió el responso u oración en el velorio del difunto excondenado a 25 años de prisión por las masacres de Barrios Altos y La Cantuta, e investigado por otras violaciones estructurales a los derechos humanos.
En el libro «Mitad monjes, mitad soldados» se documenta estas tres denuncias por abusos sexuales y psicológicos contra Figari. Y en un informe de los periodistas Pedro Salinas y Paola Ugaz se menciona que una de las víctimas de esta organización religiosa entregó su denuncia escrita el 16 de mayo del 2011 ante Gaspar Uribe y al presidente del Tribunal Eclesiástico, Víctor Huapaya Quispe. En ese momento Juan Luis Cipriani era arzobispo de Lima.
«¿A dónde se enviaron las denuncias contra Figari? El padre Huapaya, presidente del Tribunal Eclesiástico, y el cardenal y arzobispo de Lima, Juan Luis Cipriani, tienen que responder rápidamente sobre qué pasó con las denuncias contra Luis Fernando Figari, supuestamente enviadas a Roma, porque en Roma no están», señala Pedro Salinas en su blog “La voz a ti debida”.
En el 2015, Gaspar Uribe se defendió explicando que dicha entidad no tiene competencia en el caso Figari ya que solo juzga causas diocesanas y que los casos debía verlo exclusivamente el Vaticano. Asimismo, dijo que el Tribunal sería el primero en pronunciarse cuando la Santa Sede tomé una decisión sobre dicho caso.
En agosto de este año, el Vaticano expulsó al fundador del Sodalicio Luis Fernando Figari, denunciado por abuso sexual, físico y psicológico. Sin embargo, no hubo ningún comunicado ni mensaje del Tribunal Eclesiástico ni del Arzobispado, solo un tuit de Gaspar Uribe.
De igual modo, el periodista de Estación Wari, Adrián Sarria Muñoz, resaltó en sus redes sociales que en el responso a Fujimori, Gaspar Uribe y los presentes entonaron ‘Apuyaya Jesucristo’, un himno ayacuchano en quechua, olvidando que el dictador mandó a esterilizar forzadamente a casi 300.000 personas, en su mayoría quechuahablantes en situación de pobreza.
No está de más mencionar que Luis Gaspar Uribe es un asiduo usuario de las redes sociales como Twitter.
Un día después de la masacre de Ayacucho, en el contexto de las protestas contra el régimen de Dina Boluarte, compartió información tergiversada sobre los asesinatos de las víctimas de la represión militar en esta región. Hay diversos informes periodísticos y de organismos internacionales que señalan a miembros del Ejército Peruano como responsables de la masacre. Y el Ministerio Público se encuentra investigando a generales y soldados.
También se hizo conocido en el 2018 por dar un discurso ultraconservador en donde rechazaba a políticos que respaldaban el enfoque de género y el matrimonio homosexual. «Perdónalos porque no saben lo que hacen. Son voces tentadoras y malignas”, dijo durante un sermón de semana santa en la Catedral de Lima. De igual modo es un vocero «provida».