La Organización Mundial de la Salud (OMS) ingresó como enfermedad mental la adicción a los videojuegos.
«Incluimos el desorden de jugar de forma adictiva tras analizar las pocas evidencias que tenemos y tras escuchar a un Comité Científico que sugirió que este nuevo fenómeno se incluyera como una enfermedad que puede y debe ser tratada», sostuvo el director del departamento de Salud Mental y Abuso de Substancias de la OMS, Shekhar Saxena. Saxena.
El funcionario explicó que la falta de datos empíricos es una razón para incluir la adicción a los videojuegos como un desorden mental, pues hasta ahora toda la evidencia apunta hacia ese diagnóstico y se necesita realizar más estudios.
Según las cifras de la OMS, entre el 2 y 3% de los que juegan a videojuegos “tienen un comportamiento abusivo y pernicioso”, pero quieren tener certeza científica.
Saxena señala que los videojuegos no son nocivos en sí mismos, como tampoco lo es ingerir alcohol; sin embargo, el problema se origina cuando el consumo es abusivo y, en consecuencia, se generan cambios en el comportamiento.
Explicó también que «Si el niño, adolescente o adulto que juega lo hace sin parar y deja de salir con sus amigos, deja de hacer actividades con sus padres, se aisla, no estudia, no duerme y solo quiere jugar, eso son signos de alerta de que podría tener un comportamiento adictivo y que tiene que buscar ayuda. Si a ello se suma que hay incentivos como dinero cuando se juegan con otras personas, eso incrementa el comportamiento adictivo”.
Este anuncio se encuentra dentro de la publicación de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11), de la Organización Mundial de la Salud (OMS), después de 28 años de la última edición.
La CIE es el instrumento fundamental para identificar tendencias y estadísticas de salud en todo el mundo, contiene alrededor de 55 000 códigos únicos para traumatismos, enfermedades y causas de muerte. Proporciona un lenguaje común que permite a los profesionales de la salud compartir información sanitaria en todo el mundo.