Graciela Tiburcio Loayza
Miguel Ángel Llanqui Pari es un exmilitar que es investigado por la violación sexual de una niña de 4 años y un adolescente de 15, ambos hijos de su hermano José Carlos Llanqui Pari, quien también está incluido en la investigación. Ambos cumplen prisión preventiva en el penal de Pocollay en Tacna, pero están a punto de quedar libres por exceso de carcelería y la dilatación del juicio en su contra, ya que aún no hay sentencia.
Según las declaraciones de los mismos menores, ambos abusaron de ellos en el 2018, cuando vivían en el distrito tacneño de Gregorio Albarracín. En ese entonces, ambos estaban bajo el cuidado de su padre José Carlos Llanqui Pari, mientras su madre estaba en tratamiento oncológico entre Arequipa y Lima. Cuando su madre volvió a casa en octubre de ese año, comenzó a notar cambios en la conducta de sus hijos.
En conversación con Wayka, la madre de los menores contó que su hijo de 15 años se mostraba apático y desconfiado. Bajó su rendimiento escolar y hasta intentó suicidarse en dos ocasiones. Su niña de 4 años tenía toda la zona genital enrojecida y con llagas, al igual que su boca y garganta. Al descubrir esto los niños recién le contaron parte de lo sucedido.
«Mi hijita me dijo que su tío veía películas de terror con su hermano. Le pregunté cómo sabía y me respondió que cada vez que venía se encerraban en su cuarto y escuchaba a su hermano gritar», nos cuenta la madre de ambos niños. Aunque intenta narrar lo sucedido, en su voz se nota toda la angustia y rabia contenida de lo que sus hijos padecieron.
Su madre fue poner la denuncia contra Miguel Ángel Llanqui Pari en la comisaría y alertó al padre de los niños sobre lo sucedido. «Él fingió sorpresa e incluso fue a mi casa a insultar a mi hijo diciendo que no quería un hijo maricón, pero nunca confesó que él también había sido cómplice de ese abuso». Al mes siguiente, en diciembre, los niños confesarían a la mamá que su padre también había abusado de ellos.
Denunciados ambos hermanos, se dieron a la fuga. Estuvieron en la lista de ‘Los Más Buscados’, hasta que a mediados del 2019 fueron capturados en Lima. Cuando capturaron a Miguel Ángel Llanqui Pari, el coronel Nicasio Zapata, encargado de su captura, detalló que el exmilitar ya tenía un antecedente de violación contra una menor de 11 años.
Miguel Llanqui tiene, además, otras dos denuncias por hurto agravado. Su hermano José Carlos Llaqui, padre de los niños, tiene dos denuncias por maltrato físico y psicológico y una denuncia por falsificación de documentos.
Impunidad y Amenazas
Los niños y su madre tuvieron que huir de Tacna debido a las constantes amenazas que recibe por parte de la familia Llanqui Pari, según comentó a Wayka. Por si fuera poco, ella sola debe correr con los gastos de la defensa legal de sus hijos, pues no cuenta con el apoyo del Ministerio de la Mujer. Tiene que recurrir a amistades y vender sus cosas personales para conseguir los 20 mil soles que le cobra su abogado.
«Hace poco me llamaron desde el penal donde está el padre de mis hijos para amenazarme por haberlos denunciado. Tenemos miedo y por eso nos tuvimos que mudar. Ahora por la pandemia es más difícil encontrar trabajo, pero veo cualquier forma de conseguir dinero para mis hijos y para el juicio», nos comparte.
El abandono no solo viene por parte del Ministerio que se supone debería brindarle asistencia, sino también por parte de las autoridades de justicia. En febrero de este año, la Fiscalía Provincial Mixta Corporativa de Gregorio Albarración (Tacna) programó una reconstrucción de los hechos en las que los niños debían confrontarse con sus agresores.
«Querían que mis hijos estén presentes en esa reconstrucción. Yo no los llevé porque eso es revictimizarlos. Cómo iban a ver mis niños a esos hombres. Ya están lo suficientemente mal con lo que les ha pasado como para exponerlos a eso», contó la madre de los niños a Wayka.
El próximo 28 de febrero se vence la prisión preventiva de Miguel Ángel Llanqui Pari y la preventiva de José Carlos Llanqui Pari vence el 13de marzo. Ambos deberán salir en libertad por exceso de carcelería, pues ya les han ampliado la prisión preventiva dos veces. El juicio en su contra recién inició en noviembre de 2019, un año después de puesta la denuncia.
Este viernes 5 de febrero a las 3 pm se lleva a cabo una nueva audiencia en la que los testigos de los hermanos Llanqui Pari declararán. «Están buscando dilatar el juicio, han pasado dos años, están a punto de ser liberados porque hasta ahora no hay una sentencia. Ellos piden que se anule el proceso para que inicie uno nuevo. Eso no puede pasar», reclama la madre de los niños.
Solo en 2018, el Ministerio de la Mujer registró 8 957 casos de violencia sexual a menores de edad. En 2019, la cifra ascendió a más de 12 mil y en 2020 alcanzó más de 8 mil casos. La pregunta que esta madre se realiza constantemente es cuándo la justicia dejará de ser esquiva para las miles de niñas y niños que han sobrevivido al abuso sexual.