Con este nuevo reporte se suma más 3968 hectáreas deforestadas en tierras que ocupan los menonitas y pese a tener investigaciones abiertas. 

Gracias a una serie de imágenes satelitales publicadas por el Proyecto Monitoreo de la Amazonía Andina (MAAP), se pudo conocer que la colonia Menonitas, un grupo religioso que nace en Suiza, seria responsable de la deforestación que se observa en la colonia denominada Padre Márquez ubicada entre Ucayali y Loreto. Este nuevo reporte muestra una área de más de 90 hectáreas de bosque primario deforestado entre agosto y septiembre del presente año. 

Sin embargo, esta no sería la única área afectada. La Fiscalía Especializada en Materia Ambiental (FEMA) de Ucayali mantiene investigaciones contra las tres colonias menonitas ubicadas en la selva peruana, que han llegado a sumar un total de 3968 hectáreas deforestadas. 

Una de las zonas es la comunidad de Masisea (Ucayali), cuyo presunto delito sería por tráfico ilegal de productos forestales maderables, delitos contra los bosques en forma agravada y alteración del ambiente o paisaje. Mientras que para Tierra Blanca (Loreto) la acusación es por delitos contra los bosques o formaciones boscosas y por utilización indebida de tierras agrícolas. En el caso de Padre Márquez, la nueva zona reportada, se contempla el delito contra los bosques o formaciones boscosas en forma agravada. 

José Capella, director del Programa de Bosques y Servicios Ecosistémicos Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), mencionó para Wayka que esto se estaría convirtiendo en un patrón que carece de regulación estatal: “Es una conjunción entre una mala manera de hacer empresa y gobiernos regionales que está permitiendo a través de los predios regionales individuales se obtengan derechos en donde no corresponde, es decir donde había un reclamo de titulación de pueblos indígenas, por ejemplo, o donde existan pueblos indígenas haciendo sus propias actividades. Además tienen varios litigios y el caso de los menonitas no tiene solo una zona, sino varias zonas en las que está ocurriendo. Se está convirtiendo en un patrón que parece que está en aumento, y sabemos que ese patrón ya se ha dado en otros países y por lo tanto levanta las alarmas mucho más”.

Sobre lo último mencionado, cabe señalar que en marzo del presente año el Proyecto Monitoreo de la Amazonía Andina (MAAP) presentó su último reporte sobre focos de deforestación del 2021 en territorio amazónico, basado en alertas satelitales, que comprende datos más específicos de países como Brasil, Bolivia, Colombia y Perú, al ser los más afectados.

Entre los hallazgos claves del Mapa Base figura la pérdida de más de 1.9 millones de hectáreas de bosque primario en los nueve países del bioma amazónico en el 2021. Según el informe, en 2021, la mayor deforestación ocurrió en Brasil (70 %), seguido de Bolivia (14 %), Perú (7 %) y Colombia (6 %).

Avances en la investigación

Magaly Ávila, directora Programa de Gobernanza Ambiental en Proética, señaló para el medio de investigación ambiental Mongabay, que en las tres colonias menonitas se ha repetido el mismo patrón para la ocupación de las tierras. “Primero se produce una compra de tierra de manera irregular.  Luego realizan el cambio de uso de suelo sin contar con autorización, para después deforestar sin autorización, a pesar de que se han abierto investigaciones en su contra”, comentó.

Además, fue confirmada por el MAAP que en las zonas de Tierra Blanca (Loreto) y Masisea (Ucayali), la colonia Menonita no tenía ningún acto administrativo aprobado que le permitiera el retiro de la cobertura boscosa. 

Debido a ello, se tomó conocimiento que los gobiernos regionales de Loreto y Ucayali iniciaron investigaciones por el presunto cambio de uso de tierras no autorizado. En el mes de diciembre de 2020, el gobierno regional de Ucayali sancionó a la colonia Menonita por la comisión de esta infracción, siendo calificada como una infracción muy grave, por lo que le impuso una multa de 11 millones de soles.

Por otro lado, las FEMA de Loreto y Ucayali también iniciaron investigaciones por el cambio de uso de tierras no autorizado. Sin embargo, esta situación no se ha podido frenar.

Sobre esto, Capella mencionó “a lo que se debe hacer seguimiento es a la fiscalía, pero el procurador del Ministerio del Ambiente tiene estos casos priorizados, sin embargo hay lenta respuesta del Estado. Ahora, no se trata de un hecho menor, hay dos tipos de consecuencias, de acuerdo al Reglamento de Infracciones y Sanciones Forestal y de Fauna Silvestre podría ser hasta de 5 mil UIT y hasta de 8 años de pena privativa de la libertad”.