Redacción Wayka

Este 13 de marzo comenzará el juicio oral a los 19 defensores de territorios detenidos en septiembre de 2015 tras la violenta represión policial durante el paro indefinido contra la minera Las Bambas (MMG Limited) que dejó 3 comuneros muertos.

Durante el paro, los comuneros denunciaron que «la minera habría modificado arbitrariamente el Estudio de Impacto Ambiental del proyecto minero Las Bambas, sin respetar la consulta previa que correspondía, y perjudicándolos con estas modificaciones, al haber suprimido la construcción del mineroducto, con lo cual la empresa usaría sus carreteras públicas para llevar y traer su material».

Brandon Quispe y Javier Mamani, como los otros 17 detenidos, fueron torturados en un improvisado centro de detención dentro de la mina. Ambos ayudaban a trasladar a los heridos en una ambulancia cuando un grupo de policías, tras pedirle sus documentos, los golpearon, les sembraron falsamente armas y obligaron a disparar con ella, y los trasladaron bajo fierros y palos en una camioneta hacia el campamento minero.

El fiscal y el juez no han considerado las versiones de Brandon y Javier ni tampoco investigaron a la policía, que custodiaba a la minera; pese a que el arma supuestamente encontrada a Brandon le pertenecía a un efectivo de la PNP y cuya aparición no ha podido ser explicada por la policía.

La prueba con la que ambos están siendo procesados y por lo que la Fiscalía Provincial Mixta solicita entre 11 y 17 años de cárcel bajo la acusación de tenencia ilegal de armas y producción de peligro común con medios catastrófico, son los atestados policiales y supuestas actas levantadas. A su vez la minera Las Bambas pide 86 mil dólares como reparación civil.