Marina Ramos Quispe, una docente y madre de dos niñas, fue asesinada por su conviviente Juan Valdivia Gutiérrez, un trabajador minero de la comunidad de Trapiche, en Sicuani, Cusco.
Por Wilson Chilo
Cusco registra un nuevo feminicidio. La docente Marina Ramos Quispe de 36 años, fue asesinada con un arma blanca por su conviviente en la comunidad de Trapiche, en Sicuani, Cusco. Según fuentes cercanas a la víctima, la docente ya había denunciado anteriormente ser víctima de agresiones físicas y sufrir acoso por parte de su pareja.
Marina Ramos no pudo recibir el homenaje de sus estudiantes por el día del maestro. La profesora de la I.E. 584 del distrito de Marangani en la provincia de Canchis era también vicepresidenta de la junta directiva de la comunidad campesina de Trapiche y madre de dos niñas.
Este no es el primer caso de feminicidio en la región de Cusco. Hasta el mes mayo se reportaron 4 feminicidios y 4 casos de tentativas de feminicidio, de acuerdo al último reporte del Programa Aurora del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables. Con este último hecho, en lo que va del 2023, Cusco registra en total 5 feminicidios, en las provincias de: La Convención (1), Quispicanchi (1), Urubamba (1) y en Canchis (2).
Madre e hija fueron agredidas
En la madrugada del 5 de julio, la comunidad de Trapiche fue alertada por los gritos de las hijas de Marina, ellas habrían intentado defender a su mamá de las agresiones con arma blanca de Juan Valdivia Gutiérrez, quien aparentemente estaba en estado de ebriedad. Como consecuencia de esa violencia, Mariana resultó con heridas letales en el cuerpo, su hija también fue herida en el antebrazo izquierdo.
Todavía con vida, Marina y su menor hija fueron trasladadas en el vehículo de su agresor al hospital de ESSALUD de Sicuani, las víctimas ingresaron al área de emergencia a las 4:00 am. Por la gravedad de sus heridas y la pérdida de sangre, Marina falleció dentro del nosocomio con el diagnóstico de “Shock hipovolémico por hemoperitoneo”. Las heridas de su menor hija fueron atendidas y controladas por los médicos de turno.
Ante esa situación los médicos pidieron la intervención de la Policía Nacional y la detención de Juan Valdivia, quien fue trasladado a la comisaría de Sicuani para que el fiscal de turno inicie con las diligencias e investigaciones. Según el código penal, a Valdivia les espera una pena no menor de 20 años por el delito de feminicidio.
“El Estado no protege a las mujeres”
En lo que va del 2023 la provincia de Canchis ya ha registrado dos feminicidios. Ante este último hecho de violencia del 5 julio, organizaciones de mujeres y familiares de Marina Ramos impulsaron una vigilia en la plaza de Sicuani para exigir justicia y denunciar la violencia contra la mujer.
Gloria Pilares, lideresa de Warmikuna Puririsun, colectivo que hace seguimiento a casos de violencia en la provincia de Canchis, indicó que la víctima ya había denunciado ante la DEMUNA hechos de violencia por parte de su pareja, a quien calificaron como agresivo y celoso. Según las testigos, Marina, por temor, no continuó con la denuncia.
“En ese trayecto de denunciar hay revictimización y eso desanima a las víctimas para continuar. Nosotras cuando acompañamos hacemos el cuadre al funcionario, si las atienden mal cuando estamos presentes, imagina cuando van solas”, indica Gloria.
También indicó que los operadores de justicia y el CEM, no deben tomar superficialmente las denuncias de violencia que reciben, además, piden a las entidades dar seguimiento a las víctimas si detecta un ambiente de violencia constante. Además aconsejó que si se percibe que la víctima convive en un ambiente de violencia, el Estado debería proteger a la víctima, haciendo seguimiento de casos individuales.
“Este gobierno está priorizando perseguir la lucha social y están descuidando atender la violencia contra la mujer”, afirma la lideresa canchina.
