Por Luis F. Rodríguez Jiménez
Redacción Wayka
¿Aprovechando la coyuntura? La Municipalidad Metropolitana de Lima (MML) publicó el pasado jueves 12 de marzo a través del Sistema Electrónico de Contrataciones del Estado (SEACE), una convocatoria de licitación de los servicios de limpieza pública. El proceso finaliza el próximo 23 de abril con el otorgamiento de la buena pro a la empresa ganadora. Es decir, apenas 6 semanas y con un Estado de emergencia nacional a cuestas.
Pero lo más extraño de la convocatoria es que hay una sentencia de la Corte Suprema que ordena que más de 700 trabajadores que brindan actualmente el servicio de limpieza pública sean incorporados en la planilla de la MML. Según señala el sindicato de estos trabajadores, el objetivo de la convocatoria sería evadir el cumplimiento de dicha sentencia que ya lleva casi dos años sin ser acatada por dos gestiones ediles.
¿Por qué ahora?
Raúl Oviedo Camacho, secretario general del Sindicato de Trabajadores Obreros de la Empresa Innova Ambiental (SITOBUR), considera que la gestión de Jorge Muñoz está aprovechando la orden de aislamiento social decretada por el presidente de la República, Martín Vizcarra, para sacar adelante esta licitación que ocasionaría “el despido de miles de trabajadores de limpieza”.
“En las bases del concurso […] no existe ninguna cláusula donde se proteja la continuidad laboral ni los derechos de las actuales trabajadores que llevan más de 20 años trabajando para la ciudad de Lima. Y por tanto esto significa el despido masivo de ellos”, señaló Raúl Oviedo.
Es decir, luego de otorgársele la buena pro a la empresa ganadora el 23 de abril de este año, el personal actual sería reemplazado por el que contrate la nueva empresa encargada de la limpieza de la ciudad de Lima.
Detalle del proceso de licitación llevado a cabo por la MML que inició el 12 de marzo y finaliza el 23 de abril. Es decir, en solo 6 semanas
Además, según Raúl Oviedo, el alcalde Jorge Muñoz “sabía que se iba a declarar el Estado de emergencia este domingo”, ya que estuvo los últimos días en coordinación constante con el presidente de la República a causa de la pandemia del coronavirus (COVID-19). Además , hacer la convocatoria en estas fechas, evitaría acciones de protesta por parte de SITOBUR.
Similar opinión tiene Isabel Cortez, actual trabajadora del servicio de limpieza pública en la ciudad de Lima.
“A nosotros nos parece indignante que se aproveche una situación de emergencia como la que estamos viviendo, que no se piense en los trabajadores. Al parecer aprovechando esta situación (de emergencia) se está realizando el concurso, [esta nueva] tercerización de la limpieza pública”, refirió.
¿Por qué el alcalde Jorge Muñoz estaría interesado en que cientos de trabajadores de limpieza se queden eventualmente sin trabajo?
Quizá la respuesta deba ser buscada en 2018, cuando la Corte Suprema de Justicia reconoció la existencia de una relación laboral “a plazo indeterminado” entre los trabajadores de SITOBUR y la Municipalidad de Lima, y que éstos debían integrar la planilla de la MML.
Sentencia ignorada
El origen del problema se remonta al 2015 cuando SITOBUR demandó a Innova Ambiental y a la Municipalidad de Lima por “desnaturalización de tercerización laboral”. Es decir, el sindicato consideraba que la labor de sus agremiados, realizada desde 2002, era “uno de los servicios principales” que la municipalidad brinda por su propia naturaleza y objetivos; y, por lo tanto, no se podía “tercerizar”.
El proceso judicial finalizó el 17 de octubre de 2018 cuando la Corte Suprema le dio la razón a SITOBUR y ordenó que los trabajadores sean inscritos en las planillas de la MML. Eran los últimos meses de la gestión edil de Castañeda Lossio, quien ignoró la ejecución de la sentencia.
En 2018, la Corte Suprema sentenció que la MML debía registrar a los trabajadores de SITOBUR en planillas del municipio y que existía una relación laboral indeterminada entre las partes
Por esos días, el entonces virtual alcalde de Lima, Jorge Muñoz, consultado en una entrevista periodística acerca del caso, mencionó que, si había una sentencia judicial, “nosotros somos respetuosos de lo que uno de los poderes del Estado ordena y manda. Entonces, ahí vamos a tener que acatar”. Más de un año después de estas declaraciones, hasta ahora no se han hecho mayores esfuerzos para acatar la sentencia.
A fines de 2018, el entonces virtual alcalde Jorge Muñoz afirmó que acataría la sentencia de la Corte Suprema respecto a los trabajadores de SITOBUR. Hasta ahora, no lo ha cumplido (Fuente: Facebook SITOBUR)
“En enero [de este año] la MML pidió a los trabajadores certificado de salud, certificado penal, domiciliario, judicial. Los trabajadores han gastado su dinero y los han ido a entregar a la municipalidad pero hasta ahora no se produce la ejecución del mandato judicial. Finalmente vemos […] que se está dilatando el proceso”, señaló Raúl Oviedo, presidente de SITOBUR, al respecto.
Pero eso no es todo. Según Oviedo, la MML está “ganando tiempo” para que una acción de amparo, presentada en 2018 ante el fuero constitucional, evite el cumplimiento de la sentencia de la Corte Suprema.
“Lo que está haciendo el alcalde es ganar tiempo para que avance este proceso de acción de amparo, incumpliendo [la sentencia] a través de procedimientos burocráticos, engañando y dando a entender que está cumpliendo pero en realidad no cumple. El 90% de trabajadores ya han entregado sus documentos, ¿por qué no los incorpora a la planilla municipal?”, se pregunta el presidente de SITOBUR.
Por su parte, Isabel Cortez, trabajadora del servicio de limpieza, señala que la intención del alcalde es “llegar al Tribunal Constitucional” y anular la sentencia de 2018.
“Por eso es que nos ha pedido una serie de papeles personales diciendo que va a acatar la sentencia pero nada. Solo es ganar tiempo porque mientras hace eso, está realizando este concurso público. […] Va a cambiar de empresa y esa empresa va a contratar personal nuevo”, refirió.
¿Sin conocimiento de nadie?
Wayka logró comunicarse con el regidor de la MML, José Luis Pacheco Moya, miembro de la comisión de Economía de la comuna, para consultarle sobre la convocatoria del 12 de marzo pasado. Al respecto, el funcionario municipal declaró que “ninguno de los 39 regidores” sabía que “ya se ha colgado el proceso de licitación”.
“No se ha informado a ningún regidor. No han informado absolutamente nada al Consejo Metropolitano […] Es más, yo iba a acceder a la información en el transcurso de esta semana para recopilar[la] y estar más enterado sobre el tema”, señaló el regidor.
Sin embargo, señaló que, debido a la actual coyuntura nacional, los plazos de la convocatoria “se van a tener que suspender y cambiar toda la programación”; y que, al restablecerse la normalidad, “fiscalizar” la convocatoria “será una de las primeras tareas que tenemos nosotros”.
Consultado sobre los motivos por los que la MML no ha acatado aun la sentencia de la Corte Suprema, mencionó que, a su parecer, se debía a un “tema presupuestal”.
“Lo que se tiene que hacer es prever todos los gastos al momento de asumir a todos los trabajadores que van a ingresar a la entidad. Eso es algo que vamos a tener que hacer sí o sí”, señaló el regidor Pacheco Moya.
Por otro lado, refirió que con esta nueva convocatoria no se despediría a los trabajadores reconocidos por la sentencia de la Corte Suprema sino que “serían distribuidos” por la gerencia de servicios a la ciudad.
“Ellos se encargarían de hacer una distribución de ese personal para que vayan a áreas verdes, al mantenimiento del ornato del centro histórico. Distribuirlos. Yo le consulté, si ya tenemos el personal y la maquinaria se va a quedar con nosotros, ¿porque nosotros no realizamos el servicio? [La gerenta] me explicó que [por] rentabilidad es preferible tercerizar”, refirió.
Desamparo municipal
Mientras la MML lleva a cabo un nuevo proceso de licitación para el servicio de limpieza pública, sus actuales trabajadores se encuentran expuestos no solo a la pandemia de coronavirus sino a múltiples enfermedades.
“Este problema del coronavirus ya tiene más de una semana, no es de ahora. Y hasta el momento la municipalidad [no] nos ha dicho nada. No se nos ha informado sobre medidas de prevención, ni siquiera ha mandado a un representante a brindarnos charlas. No nos ha dado implementos como jabón, desinfectante, alcohol para las manos al momento de que vamos a comer. Nada”, señaló Isabel Cortez, trabajadora de limpieza municipal.
Según señaló, esta situación se repite todos los días dado que deben tomar su refrigerio donde estén, “en medio del polvo y de la basura”. Pero, estos días de emergencia nacional, la situación se torna aún más complicada para ellas.
“Ahorita no hay baño. Todos los restaurantes están cerrados, todos los centros están cerrados. ¿Dónde voy a ir a un servicio higiénico? No se nos está reconociendo un bono, nada. Como si no existiéramos. De ese modo nos ignora la municipalidad”, refirió.
Asimismo, Isabel Cortez refirió que el alcalde debería preocuparse por costear implementos adecuados para su labor diaria, considerando que muchas de ellas son ya mujeres mayores que llevan más de 25 años trabajando en la limpieza pública.
«Deberían mejora nuestras condiciones de trabajo ya que hemos dado toda una vida en este servicio, ya que la mayoría de nuestra juventud la hemos pasado en la calle limpiando. Eso debería valorar el señor Jorge Muñoz […] Estamos expuestas y ni aun así el alcalde nos valora, no nos ve como seres humanos. Es indignante».
