Redacción Wayka
El primer mensaje de Pedro Castillo como presidente del Perú visibilizó a sectores ciudadanos que por décadas han visto sus derechos postergados y vulnerados: las mujeres, los pueblos originarios y la comunidad afroperuana. Sin embargo, resaltó la ausencia de propuestas para garantizar los derechos de las personas LGBTI y para prevenir la violencia de género.
En total, Castillo anunció cinco medidas destinadas a las mujeres y las poblaciones en situación de vulnerabilidad:
- Programa Nacional Mujer emprendedora para otorgar créditos a familias afectadas por la crisis económica de la pandemia.
- Sistema Nacional de Cuidados para niñas, niños y personas adultas mayores.
- Reconocimiento e inclusión de las ollas comunes a los programas sociales nacionales.
- Financiamiento público para la rehabilitación integral de niñas y niñas víctimas de violencia sexual.
- Fortalecimiento del Sistema Nacional Especializado de Justicia para la protección y sanción de la violencia contra las mujeres e integrantes del grupo familiar.
Al respecto, Liz Meléndez, directora del Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, resaltó que, si bien han sido propuestas necesarias para fortalecer la autonomía económica de las mujeres y garantizar el acceso a justicia, también se debieron considerar las medidas preventivas, como la educación sexual integral, para erradicar situaciones de vulneración.
“Es importantísimo el que se haya declarado en emergencia a la educación, así como resaltar la educación bilingüe y rural. Sin embargo, al momento de hablar de la currícula no mencionó el enfoque de igualdad y género. Es un gran pendiente en nuestro país que no debe ser soslayado”, apuntó Meléndez.
En esa misma línea, Rocío Gutierrez, subdirectora del Movimiento Manuela Ramos, agregó que el enfoque de igualdad de género en la educación también contribuye a aumentar la calidad educativa del país y genera herramientas “para desterrar problemas que afectan la vida y oportunidades de las mujeres como es el embarazo adolescente y la violencia sexual contra niñas y adolescentes”.
Hasta julio de este año, más de 23 mil adolescentes, entre 15 y 19 años, han tenido hijos según los registros del Ministerio de Salud y 522 niñas menores de 14 años, ocho de ellas menores de 10 años, han tenido partos producto de violaciones sexuales.
Gabinete sin agresores
Otro punto resaltante en el discurso presidencial de Pedro Castillo fue la mención a una Asamblea Constituyente plurinacional, popular y con paridad de género. La directora del CMP Flora Tristán saludó este anunció, pero agregó que el criterio de paridad también debería ser considerado en la conformación del gabinete ministerial, en el cual no debería ser incluida ninguna persona con antecedentes de violencia de género.
Como se recuerda, en las semanas previas a la toma de mando de Castillo, se voceó a Roger Najar como uno de los candidatos para presidir el gabinete ministerial. Najar fue denunciado por no reconocer a su hija a quien, posteriormente solo le pasó una pensión de 70 soles mensuales. Su hija nació en 1987 cuando Najar tenía 30 años y su madre solo 14.
Derechos LGBTI ausentes
Otra de las grandes omisiones en el discurso presidencial fueron los derechos de la ciudadanía LGBTI. Alexandra Hernández, directora de la organización Más Igualdad, lamentó que no haya reconocido la existencia de otras poblaciones en situación de vulnerabilidad como lo son las lesbianas, gays, bisexuales y personas trans.
“Una no mención también envía un mensaje para las organizaciones, activistas y personas LGBT. Ya sabíamos que este gobierno de Castillo planteaba nuevos retos para los cuales obviamente ya estamos bastante preparados. Son muchos años de lucha y creo que vamos a continuar por el mismo camino”, señaló Hernández.
Además, alertó que el anuncio sobre el servicio militar obligatorio para personas que no trabajan ni estudian puede afectar directamente a las personas trans. “La población trans no tiene muchas oportunidades para acceder a trabajos y a educación. Podrían verse afectadas con esta medida porque tendrían que enfrentarse a un espacio militarizado que históricamente ha sido violento para las disidencias”, enfatizó.
Por su parte, Jessenia Casani, integrante del Estudio para la Defensa de los Derechos de la Mujer, recalcó que “en este nuevo gobierno también es importante visibilizar que las personas LGBTI son ciudadanas de este Bicentenario” y que se debe fortalecer la Política Nacional de Igualdad de Género para romper todos los prejuicios que vulneran los derechos de las mujeres y la comunidad LGBTI.
Según la II Encuesta Nacional de Derechos Humanos del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, se estima que en el Perú más de 1.7 millones son personas LGTBI. Cabe resaltar que el gobierno anterior culminó mandato dejando como pendiente el debate de la Ley de Matrimonio Igualitario y la Ley de Identidad de Género.