Los médicos que la apliquen quedarían libres de sanciones penales, pues el fallecimiento se consideraría como natural, según proyecto de ley. Se plantea derogar las leyes que condenan con prisión esta práctica.

La eutanasia sería legal en el Perú si el Congreso aprueba el proyecto de ley que la autoriza para pacientes con enfermedades terminales o sin tratamiento curativo. Así, esta práctica también dejaría de ser un crimen, pues se derogarían los artículos 112 y 113 del Código Penal, que indica una sanción no menor de 3 años para quienes cometan homicidio piadoso.

Para solicitar la ayuda médica, se propone que el paciente firme un documento en el que asegure que ningún tratamiento fue efectivo para curar su enfermedad. Este tendrá que llevar también la firma de un testigo antes de que se archive en la historia clínica.

«La petición se formulará de manera libre, consciente, voluntaria y por escrito, debidamente suscrita por el requirente o en el caso que se vea impedido de manifestar su voluntad por la persona designada por él. También podrá dejar constancia de su decisión antes de que la enfermedad esté en fase terminal a través de un documento notarial», se lee en el proyecto de ley.

PROCEDIMIENTO

La iniciativa propone que la eutanasia se concrete mediante el suministro de una sustancia o la prescripción de esta para que el médico del paciente se lo aplique en su vivienda o en un centro de salud.

Los médicos podrían negarse a realizar la eutanasia si consideran que los motivos carecen de sustento. Tal decisión se anularía si el paciente o su representante apela ante el Comité de Ética del hospital en un plazo máximo de 30 días.

Los profesionales también pueden rehusarse a su aplicación si no están de acuerdo. En ese caso, otro especialista quedaría a cargo del procedimiento.

La Oficialía Mayor del Congreso de la República aún no designa las comisiones donde se debatiría este proyecto de ley antes de que llegue al pleno.

CASO ANA ESTRADA

La propuesta legislativa se presentó semanas después de que Ana Estrada presentó una acción de amparo contra el Estado para que le reconozcan su derecho a una muerte digna.

Desde que tiene 12 años, ella sufre de poliomelitis, una enfermedad que degenera los músculos y debilita el cuerpo de forma lenta. En 2015, este mal afectó sus músculos respiratorios, lo que le causó una traqueotomía que demanda apoyo constante de otras personas.

«Yo estoy con enfermera las 24 horas al día. En las noches deben cambiarme de posición y luego me despiertan para pasarme el primer alimento por la gastro. Después, si es que estoy cansada, sigo en cama o durmiendo. Depende de cómo me sienta porque cada día es diferente. Mi condición es de hospitalizada y tengo que cumplir las normas que me da EsSalud. No puedo salir de mi casa. Incluso antes de la pandemia, cuando quería hacerlo, mi papá tenía que firmar un documento por si me pasaba algo», contó en La República.