La ordenanza contra la discriminación pertenece a la Municipalidad de Veintiséis de Octubre, y es la segunda en la región que incorpora derechos para la población LGTBIQ+. La norma fue promovida, diseñada y coordinada por la activista trans Tonika Antón Farfán, en alianza con otras redes de activistas.

Por Malú Ramahí

Un gran logro para la población LGTBIQ+. El 1 de febrero, la Municipalidad de Veintiséis de Octubre en Piura publicó la ordenanza Nº 011-2022-MVDO-CM que prohíbe la discriminación en todos sus ámbitos, y que incluye además el respeto a la identidad de género de las diversidades sexuales.

Tonika Antón Farfán, activista trans y Coordinadora regional de la Mesa de Concertación LGTBIQ+ Piura, fue quien promovió y diseñó esta ordenanza que toma en cuenta la situación de vulnerabilidad que vive la población que representa. Ella, junto a otros colectivos, han venido impulsando políticas a favor de la identidad de género en la región.

“Las personas lesbianas, gays, bisexuales, trans e intersex, han sido y son sistemáticamente discriminadas y estigmatizadas debido a su orientación sexual e identidad de género», se puede leer en la primera parte de la ordenanza.

Uno de los puntos más resaltantes es el tratamiento de los nombres y el género de las personas trans. En el artículo 4º, sobre los documentos de identidad, hacen énfasis en que la comunidad transgénero pasa por “muchas situaciones de incomodidad” cuando deben hacer uso de su DNI y este no coincide con su identidad de género.

Para ello, la ordenanza indica que la Municipalidad se compromete en “capacitar y sensibilizar a su personal para que en posibles casos como estos puedan llamar por el apellido a las personas trans (…), además de difundir entre otras instituciones públicas y privadas la importancia del trato por identidad de género de esta población”.

Tonika Antón cuenta que ya lleva alrededor de 10 años involucrada en la gestión pública. «Este año estamos viendo la forma de sacar una ordenanza regional. El gobernador ya tiene u compromiso con nosotras», menciona.

También hizo énfasis en la importancia de la participación activa de la población LGTBIQ para la gestión de política la públicas. «Unidad, unidos, unides vamos a lograrlo», finaliza.

Cabe señalar que esta ordenanza también incluye otros sectores vulnerables como las mujeres, los adultos mayores, la comunidad afrodescendiente, personas con discapacidad y trabajadoras del hogar.

ORDENANZAS CONTRA LA DISCRIMINACIÓN

Si bien esta ordenanza incluye términos relacionados a la identidad de género, no es la primera que involucra a la población LGTBI en la región. En el 2012, en el distrito de Castilla, a través de la Ordenanza Municipal Nº011-2012, se trató el tema de la homofobia y la identidad de género en uno de los apartados.

“La Municipalidad Distrital de Castilla llevará a cabo una campaña de sensibilización en relación a la homofobia, para lograr que la ciudadanía comprenda que la orientación sexual no tiene ninguna relación con la violación de normas morales o legales. La Municipalidad pondrá especial énfasis en preparar a todo su personal al respecto. Todo esto en el marco del respeto mutuo entre las personas involucrada”, señala el texto.

Patty Alburquerque Guarnizo, alterna de Perú para la RedLac Trans, fue una de las involucradas en la gestión de esta primera ordenanza. Ella cuenta que este primer paso ha servido de modelo para impulsar las demás políticas públicas que tienen pensando proponer.

Además indica que el trabajo no solo se reduce a la coordinación de ordenanzas, sino también trabajan capacitaciones con la comunidad para que reciban capacitaciones sobre sus derechos.

«Las compañeras, compañeres, ya están capacitados también para saber actuar en el momento de reciben una discriminación y poder hacer la denuncia respectiva para que se sancione», indica.

Patty cuenta que el camino no es fácil, ya que el mayor obstáculo es el poder reunirse con las autoridades competentes para plantearles los proyectos de ordenanza o las modificaciones de estas, a nivel distrital, provincial y regional, para que puedan incluir la «identidad de género».

LEY DE IDENTIDAD DE GÉNERO

Tonika Antón señala que aún está pendiente la Ley de Identidad de Género. «Para nosotros es muy importante porque no solo nos va a solucionar el cambio de nombre en el DNI, sino también otras demandas de la comunidad». Antón fue una de las personas que participó en la propuesta de ley que, tiempo después, fue rechazada.

Por otro lado, Patty Alburquerque, quien también es coordinadora regional de Trans Organización Geminis, considera que está ley le daría a las personas trans una mejor calidad de vida, como por ejemplo el acceso a oportunidades laborales.

«Lamentablemente vivimos en una sociedad retrograda y machista en el Perú. Tienen mucho miedo de decir la palabra «género», hay muchos padrastros de la patria que se rasgan las vestiduras y se dan golpes de moral cuando realmente son unos hipócritas», dice Alburquerque Guarnizo.