El empresario chileno y socio de PPKGerardo Sepúlveda, fue interrrogado la semana pasada por la Fiscalía Anticorrupción, por los manejos que se hacían con las empresas Wesfield Capital y First Capital, las cuales recibieron pagos por consultorías por parte de Odebrecht.

Cuarto Poder reveló que en ese interrogatorio, Sepúlveda hizo referencia al proyecto Rutas de Lima, concesión otorgada a Odebrecht por la Municipalidad de Lima, para los que también se hizo asesorías, proyecto que duró entre el 2008 y 2014, durante el mandato de Luis Castañeda y Susana Villarán, cuando PPK ya no laboraba para el gobierno.

Sepúlveda afirmó que por esta consultorías, PPK recibió como pago por asesorías US$ 720,000 por parte de First Capital a través de  Latin American Enterprise Fund Managers.

“Por la asesoría financiera para el proyecto Rutas de Lima, First Capital obtuvo honorarios por casi US$ 4 millones. De ese monto, US$ 3.5 millones fueron transferidos a la cuenta de Latin American Enterprise Fund Managers, y la diferencia, casi US$ 500,000, se quedó en First Capital. Del monto transferido a Latin American, US$ 720,000 fue el pago para Kuczynski, US$ 120,000 para Denise Hernández. Busqué la asesoría de PPK porque era “mi mentor”, y su asesoría consistió en dar “consejos estratégicos” en temas financieros y proyectos”, señaló.

Sepúlveda ratificó también que Westfield Capital es en su totalidad propiedad de Pedro Pablo Kuczynski, y que el actual presidente de la República percibió honorarios de dicha empresa por las asesorías realizadas.

“Las acciones totales de Westfield Capital le pertenecen a Pedro Pablo, él era el dueño. Los dos potenciábamos la marca. Yo celebré contratos como representante, entre el 2004 y 2005. Percibía honorarios de los ingresos por las asesorías, pero el resto de las ganancias quedaba en Westfield. Quien me pagaba era Westfield”, dijo.

Sepúlveda ofreció más detalle sobre la distribución de las ganancias de Westfield Capital en los tiempos en que suscribía contratos con Odebrecht para asesorar proyectos peruanos.

“En el caso de la asesoría a IIRSA Sur, percibía el 50% de los ingresos. Westfield me pagaba con un cheque firmado por Denise Hernández. El resto del dinero se quedaba en Westfield”, sostuvo Sepúlveda.

 

¿PPK se benefició de los contratos con Odebrecht?

 

Sepúlveda reiteró la tesis de la “muralla china” de la defensa de PPK,  que según explicó existió entre ambos para no tratar, menos hablar, sobre los negocios de Westfield Capital y First Capital en el Perú.

Sin embargo, cabe recordar que en el año 2003 se firmó un contrato de asesoría entre el consorcio Transportadora de Gas del Perú, TGP, de un lado, y del otro, Westfield Capital, el Banco de Crédito y Apoyo Consultoría. Westfield, de PPK, asesoró a este consorcio, junto con el BCP y Apoyo, para obtener fondos en la banca para financiar la etapa de explotación del gas de Camisea.

Frente a esto, Gerardo Sepúlveda afirmó que PPK recibió honorarios por gestionar estos contratos en la etapa inicial del proyecto.

“Pedro Pablo participó al inicio del contrato entre Westfield y TGP, cuando aún no era funcionario público. No participó en la ejecución del contrato. Él se contactó con las empresas Hunt Oil y Techint. Los honorarios de éxito de Westfield fueron de US$ 650,000. Como Pedro Pablo gestionó el contrato, me pareció justo reconocerle una participación”, agregó.

Frente a una posible vacancia, la puerta giratoria entre Odebrecht y el actual presidente PPK continúa revelando más detalles de su relación como empresario y funcionario público, que merecen más de una explicación.