Por Wilson Chilo, corresponsal en Cusco
Victoria Quispe tenía 60 años y fue víctima de una violación grupal el pasado 27 de setiembre, en el distrito de Poroy, Cusco. Estuvo internada durante nueve meses en la Unidad de Cuidados Intensivos de la ciudad del Cusco, debido al nivel de violencia de la que fue víctima. Falleció a inicios de julio de este año, sin conocer el significado de la justicia.
Al cumplirse los ocho días de su fallecimiento, sus hijos y familiares armaron un altar con velas, flores y la comida favorita de Victoria. También se realizó un plantón en la plaza central del distrito de Poroy para pedir justicia.
“Para los pobres no hay justicia”, indican los hijos de Victoria. Las autoridades no actuaron con celeridad, uno de los presuntos violadores, Severino Cáceres Cuiro de 54 años, está prófugo de la justicia. Los otros tres acusados, Efraín Toccas Ccoto de 27 años, Fernando Quispe Ccoto, sobrino de la víctima, de 21 años y Enrique Quispe Concha de 40 años, se encuentran en prisión preventiva.
A nueve meses de lo ocurrido, todavía no hay un juicio. La familia solo ha conseguido que se amplíe la prisión preventiva contra los acusados. El caso todavía se encuentra en investigación preparatoria, a cargo de la magistrada Yaneth Mireya García Mojonero, de la Segunda Fiscalía Penal, del distrito de Santiago, Cusco.
Una familia en busca de justicia
Victoria Quispe era una mujer independiente, señalan sus hijos. Vivía sola, en el distrito de Poroy, a media hora de la ciudad del Cusco. Para solventar sus gastos personales, vendía comida y bebidas, en su propia casa.
Como cualquier día, llegado el toque de queda, Victoria ya se proponía descansar. Fernando Quispe y sus tres amigos, llamaron a su puerta, le pidieron que les venda cerveza y preguntaron si podían beber dentro de su casa. Victoria reconoció a su sobrino y a sus acompañantes y los dejó pasar.
Pasadas algunas horas, los cuatro varones violentaron sexualmente, golpearon e incluso realizaron cortes en el cuerpo de Victoria.
Los agresores dejaron a Victoria desmayada en el patio de su casa y al salir cerraron la puerta por fuera con un candado. Victoria habría intentado salir de su vivienda para buscar ayuda.
Entre los actos de violencia y la salida de las cuatro personas, existen momentos grises. Incluso se sospecha de la presencia de testigos que no habrían dado el aviso a la Policía Nacional, estos hechos están en investigación.
Ya en la mañana, Marleni -hija de Victoria- se dirige a la casa de su madre. Logra ingresar a la vivienda y encuentra a su madre débil, Victoria había perdido mucha sangre debido a los cortes y a la violencia sufrida.
Marleni se dirigió a la comisaría para pedir un auto y llevar a su madre al hospital en Cusco. Los efectivos policiales priorizaron interrogarla para obtener información. Se dirigieron a la casa de Victoria y luego fueron en busca de los acusados.
Victoria llegó al hospital del Cusco y por la gravedad de sus heridas es internada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), a partir de ese momento, Victoria fue sometida a diferentes operaciones. Producto de infecciones internas, falleció el 02 de julio del 2021.
Prófugo todavía no se encuentra en el Programa de Recompensas
Hecha la denuncia policial, la fiscalía pidió prisión preventiva para los cuatros acusados, sin embargo, solo notificó y detuvo a Severino Cáceres y Enrique Quispe. Los otros dos violentadores, Efraín Toccas y Fernando Quispe, no fueron notificados debidamente, por ello, fueron detenidos un mes después.
Los hijos de Victoria Quispe estaban consternados al ver en la calle a los agresores de su madre. La indignación creció cuando el Juzgado de Investigación Preparatoria dictó comparecencia simple a favor de Severino Cáceres, quien fue liberado.
Ante esta situación, la fiscalía apeló esta resolución, el caso pasó a otro juez y en dos oportunidades, los magistrados rechazaron el pedido de prisión preventiva, ya que consideraron que no existían los suficientes elementos de convicción.
Después de tres meses de apelación, el Sétimo Juzgado de Cusco, dictó comparecencia con restricciones. Al no ser suficiente, el Juzgado Superior, dictó la prisión preventiva contra Severino Cáceres, quien ya había fugado. A pesar de esta situación, su rostro no se encuentra en el Programa de Recompensas para asegurar su captura.
Marleni Toccas Quispe, hija de Victoria Quispe, pide justicia para su madre: “no solo acá en Cusco, en todo el Perú sucede esto, violan a las mujeres, las matan, la mujer llora, sufre, y los nombres (violadores) como si nada están caminando en la calle”.
El juicio oral iniciará en un plazo de 9 meses
La Abogada de la familia, Eulalia Margot Calvo Naveros declaró para Wayka: “estamos en una etapa de investigación preparatoria, quiere decir, que Fiscalía está realizando la investigación para poder determinar la acción de cada uno de los imputados, recién se va poder determinar el rol que cada uno tuvo cuando fiscalía emita una acusación, esta pasa al juzgado y recién se programa una audiencia de juicio oral”, indicó.
Otro aspecto a considerar, es que la investigación ha sido declarada compleja, pues se solicitó como prueba anticipada la declaración de Victoria. Debido al estado de salud de la víctima, no se pudo llevar a cabo esa diligencia, “solo eso se estaba esperando para que la fiscalía emita el requerimiento de acusación, tras el fallecimiento, se tiene que recabar la historia clínica y el certificado de defunción”, refiere la abogada Margot Calvo.
Adultos mayores víctimas de violación sexual
Desde que inició la pandemia en el país, la violencia contra la mujer no ha parado, en especial en Cusco que es la tercera región con más denuncias de violencia contra la mujer, 5 694 casos. Respecto a los casos atendidos a nivel nacional, en los Centros de Emergencia de la Mujer (CEM), de enero a junio de 2021, se observa un incremento de 78,4 % frente a lo registrado en el mismo periodo del año pasado.
La historia de Victoria, es uno de los 115 casos registrados el 2020. De acuerdo al reporte del Programa Nacional Aurora, entre enero y junio del 2021, son 73 adultos mayores -60 años a más- que han sido víctimas de violación sexual.
