Según datos de plataformas como Glassdoor, Tusalario.org y Bumeran, el sueldo de un periodista oscila entre los S/ 1.500 y S/ 1.800, uno de los más bajos en el sector de Comunicaciones. Además están las malas condiciones en las que laboran dentro de sus medios. En respuesta, los periodistas se han sindicalizado, pero han sufrido represalias. Un informe de la Asociación Nacional de Periodistas (ANP) recopila los casos de Latina, América TV, Diario La República, El Comercio, TV Perú, La Industria, Nativa, Radio Nacional y El Tiempo.

Por Jair Sarmiento

Los periodistas ganan muy poco y trabajan en precarias condiciones, y si se sindicalizan o se organizan para reclamar por sus derechos laborales sufren represalias como despidos arbitrarios o ceses colectivos, esto es lo que concluye el informe Vulneraciones laborales en el sector periodístico de la Asociación Nacional de Periodistas (ANP), en el marco del 01 de mayo, Día del Trabajador.

En ese sentido, el documento señala que la precariedad en el sector periodístico surge desde la primera etapa de acceso al mundo laboral. Según datos de plataformas como Glassdoor, Tusalario.org y Bumeran, el salario promedio sin descuentos de un periodista oscila entre S/1400 y S/1800 mensuales, ubicándose como uno de los más bajos en el ámbito profesional de la comunicación.

Es necesario resaltar que hay medios de comunicación en donde se paga incluso el sueldo mínimo vital (S/ 1,025) y un poco más si se trata de un periodista con años de experiencia. Cabe agregar que la temporalidad de los contratos (por ejemplo, tres meses) es una de las razones por las que las mujeres y hombres de prensa viven en una constante inestabilidad económica y laboral. A eso se suma la falta de equipos o herramientas de trabajo en pésimo estado, un horario laboral que no se respeta, una salud mental deteriorada, acoso sexual, maltratos y represalias de los dueños del medio.

En los últimos 16 meses (entre enero del 2023 a abril del 2024) la ANP ha registrado por lo menos 361 casos de trabajadores despedidos o cesados de su actividad laboral, pero podrían ser muchos más ya que hay quienes no denuncian por temor a represalias o no ser contratados en otro medio.

Dicho informe recopiló los casos producidos en grupos mediáticos como El Comercio y La República, así como en canales de televisión de alcance nacional: Latina y América TV, y los medios estatales TV Perú y Radio Nacional. El documento revela un caso regional, el cierre del histórico diario El Tiempo, de Piura, en un proceso que resultó intempestivo y perjudicial para su personal. También aborda el caso del medio Nativa y el Diario La Industria.

Respecto al caso de El Comercio, se señala que durante la pandemia de la Covid-19 se despidió a alrededor de 300 trabajadores y trabajadoras. Esto siguió en los siguientes años. “Entre febrero y marzo del 2024, se llevó a cabo una segunda reducción de personal. Más de treinta trabajadores, incluyendo a varios jefes de áreas, fueron despedidos”, indica el informe de la ANP, quien también habla de la crisis de la edición impresa. Asimismo, el documento de la ANP menciona la denuncia de la periodista María del Carmen Yrigoyen sobre un caso de acoso sexual contra el fotógrafo Rolly Reyna, en el ámbito laboral dentro de la redacción de El Comercio.

Sobre el Diario La República, el informe recuerda que el 7 de diciembre del 2023, el Grupo La República cerró las ediciones impresas del norte y sur del diario principal y desvinculó a trabajadores en Lima, rescindiendo así a más del 80% de planilla.

La ANP resalta que el cierre de La República Sur no solo ha ocasionado el desempleo de muchos trabajadores, sino que ha perjudicado a periodistas como Elmer Mamani, quien fue abandonado y no recibe apoyo legal para defenderse de una querella originada por una de sus tantas investigaciones para dicho medio.

Es necesario recordar que además de estos casos de maltrato laboral, hubo denuncias de acoso sexual contra periodistas de dicho medio. El caso del exeditor Juan Álvarez Morales, quien, según testimonio de la periodista Lucero Chávez, la acosó cuando era redactora web en dicho diario. Otro caso es la de la periodista Sandra Loise, quien en el 2019 denunció a Rider Bendezú por acoso sexual.

Además de estos casos, se nombra los casos de Sindicato de Trabajadores de Latina (Sintralatina) donde trabajadores del canal fueron despedidos tras formar un sindicato; y las presiones que sufrió el Sindicato Único de Trabajadores de la Compañía Peruana de Radiodifusión S.A (SUTRAMÉRICA) por parte de América TV

“Alentamos a quienes han sufrido represalias y persecución ante la iniciativa del ejercicio de tal derecho fundamental a documentar, denunciar y continuar en la apuesta colectiva”, concluye el informe de la ANP.

Finalmente, a pesar de que los periodistas han sido y son esenciales desde siempre —como por ejemplo para visibilizar y registrar las violaciones de derechos humanos en las últimas protestas contra el régimen de Dina Boluarte—, además de bajos salarios, enfrentan situaciones que dificultan hasta imposibilitan su trabajo. La precariedad y subempleo son situaciones que se conocen en sus empresas pero que por décadas, pasando por una pandemia y hasta la fecha no han querido solucionar.