Redacción Wayka

La Corte Superior de Justicia de Cajamarca absolvió ayer a dos ronderos de la comunidad de Quillamachay, denunciados irregularmente de secuestro agravado y sentenciados anteriormente por coacción.

En la comunidad de Quillamachay, del distrito de Oxamarca, en la provincia de Celendín (Cajamarca), los ronderos Absalón Martos Vásquez y Segundo Chávez Tirado fueron denunciados en 2014 por la Fiscalía por el presunto delito de secuestro contra cuatro personas que compraban terrenos en la zona de manera irregular.

Según los comuneros de la zona, las personas intervenidas compraban los terrenos para luego venderlos a Odebrecht y llevar a cabo el Proyecto Chadín ll, que consistía en la construcción de una gran represa. Otra de las versiones que sostenían los comuneros apuntaba a que las tierras serían vendidas a alguna minera.

Inicialmente, la Corte Superior de Justicia de Cajamarca determinó que los ronderos no habían cometido el delito de secuestro agravado, pero fueron sentenciados por coacción de manera irregular, según su abogada, Mirtha Vásquez.

En su momento, la defensa legal de los ronderos resaltó el nivel de autoridad de los ronderos en sus comunidades. “Las rondas campesinas son autoridades comunales y tienen tanta autoridad como las autoridades judiciales de la justicia ordinaria. Es decir, tienen la misma condición que los jueces (…) Esto sería una persecución y criminalización contra la función rondera”, sostuvo.