El Ministerio del Ambiente (Minam) declaró emergencia ambiental por 90 días en el área de los kilómetros 11 y 12 del Ramal Norte del Oleoducto Norperuano (ONP), ubicado en el distrito de Andoas, Loreto, debido a un derrame de petróleo ocurrido hace más de 50 días en el río Pastaza.
Mediante la resolución ministerial N° 00414-2024-MINAM, se aprobó un plan de acción inmediato y a corto plazo para abordar el impacto del derrame, que afectó 18,750 metros cuadrados de aguas superficiales y vegetación ribereña, además de contaminar los afluentes del río Pastaza.
El crudo derramado ha perjudicado a comunidades nativas como Titiyacu, Aitmensa, Alianza Capahuari, Brillante de Andoas, Churus y Siwin, que dependen del río para actividades como pesca, aseo y transporte.
El portal Vigilante Amazónico informó que el derrame, ocurrido el 3 de octubre, tuvo un alcance de hasta 75 kilómetros en el río Pastaza. Según el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), Petroperú no atendió adecuadamente la emergencia. La empresa estatal reconoció el incidente, pero reportó un impacto menor al señalado por OEFA, indicando que el derrame ocurrió durante trabajos de presurización y tratamiento químico en la tubería del oleoducto.
El Observatorio Petrolero de la Amazonía Norte descartó, por el momento, la intervención de terceros en el incidente. Sin embargo, las causas exactas del derrame aún no han sido determinadas.
El Centro de Salud de la comunidad Nuevo Andoas denunció que hasta el 17 de octubre Petroperú no proporcionó agua potable a las comunidades afectadas, obligándolas a utilizar agua del río sin análisis previos, lo que puso en riesgo su salud.
El río Pastaza es la principal fuente de agua para numerosas comunidades nativas, incluyendo Nuevo Porvenir, Nuevo Andoas, Los Jardines, Alianza Topal, Andoas Viejo, Capahuari Urko, Pañayacu, Nueva Vista, Huagramona, Naranjal Pastaza y Nueva Vida, ubicadas río abajo del punto del derrame.