Declaraciones obtenidas por el fiscal José Domingo Pérez de exdirectivos de la compañía Sudamericana de Fibras (SDF) testificaron y entregaron documentos que muestras millonarias donaciones de hasta US$7 millones hechas por el empresario Juan Rassmuss, quien era dueño de SDF, a las campañas de 2011 y 2016 de Keiko Fujimori. Estos aportes representan el 43% del financiamiento ilícito que la candidata fujimorista según la investigación fiscal.
Rassmuss era un empresario cercano al régimen de Alberto Fujimori y recibió grandes beneficios por eso: compró acciones estatales de Bayer Industrial y se adjudicó el lote petrolero XIII. Incluso, uno de los gerentes de su empresa Metalúrgica Peruana S.A., Alberto Pandolfi, fue primer ministro. Rassmuss falleció en marzo de 2016; pero, según una investigación de La República, dejó todo coordinado para que sus empresas sigan aportando a la campaña de Keiko Fujimori.
Los exdirectivos de SDF señalan que Rassmuss simuló contratos de préstamos entre sus empresas para direccionar el dinero a la campaña fujimorista. Los registros de la compañía indican que US$2 millones fueron entregados en 2011 cuando Keiko Fujimori aún era congresista y estaba obligada a rendir cuentas sobre esos ingresos, pero nunca lo hizo. Jorge Yoshiyama Sasaki aseguró al fiscal que el dinero que aportó Juan Rassmuss sí llegó a Keiko Fujimori.
El fiscal Pérez sostiene que los US$7 millones entregados en total fueron obtenidos mediante las siguientes modalidades: un préstamo de South American Minerals, unos dividendos de Sudamericana de Fibras y otro préstamo para financiar un supuesto tratamiento médico.
Las declaraciones de los exdirectivos y los registros de la propia empresas sustentan que el 2 de marzo de 2010, Rassmuss simuló un préstamo por US$12.8 millones entre sus empresas South American Minerals Inc. y Sudamericana de Fibras (SDF). En esa ocasión, Rassmuss dispuso que SDF devolviera el dinero en efectivo a las personas que él o Jaime Yoshiyama dictaminaran. Entre las personas que recibieron el dinero estuvieron Mark Vito, esposo de la candidata fujimorista.
“El señor Juan Rassmuss hizo un préstamo a la empresa Sudamericana de Fibras en el 2010 (…), y solicitó que (las devoluciones) se las entregáramos en efectivo a las personas que el señor Jaime Yoshiyama nos indicara. El dinero salió de Sudamericana de Fibras como devolución de un préstamo. (…) Una parte de los montos entregados entre el 9 de febrero y el 16 de marzo del 2016 son préstamos que el señor Juan Rassmuss solicitó a Sudamericana de Fibras. (…) Y las entregas del 12 y 13 de mayo del 2016 fueron dividendos de Sudamericana de Fibras que el señor Rassmuss solicitó sean entregados a quien el señor Jaime Yoshiyama designe”, declaró Enrique Gubbins, directivo y accionista de la empresa de Rassmuss.
De acuerdo con los documentos obtenidos por la Fiscalía, el exgerente general de SDF, Leandro Mariátegui Cáceres, por disposiciones de Enrique Gubbins, autorizó el retiro de dinero de la cuenta de la empresa SDF en el Scotiabank, Para trasladar el dinero, se utilizaban vehículos Hermes hacia el local de la compañía en el Callao para guardarlos en una caja fuerte y esperar a las indicaciones de Yoshiyama.
“SDF tenía una deuda con South American Minerals. Ambas de propiedad del señor Juan Rassmuss, pero con distinta razón social y representación jurídica. Se retiraba fondos de las cuentas de SDF para pagar a la empresa SAMCO. (…) Mi función terminaba firmando la carta (de extracción para el banco autorizando el retiro del dinero). El área financiera cuyo encargado era el señor Daniel Woll (Rivas) eran quien se encargaba de traer el dinero y también de hacer la entrega respectiva”, testificó Leandro Mariátegui.
Sus testimonios también han sido ratificados por el exgerente de Administración y Finanzas de SDF, Daniel Woll Rivas. Los documentos que respaldan sus declaraciones están en manos del fiscal José Domingo Pérez y son parte de la acusación por lavado de activos que recae contra Keiko Fujimori y su esposo Mark Vito.