En el distrito de San Juan de Lurigancho, una empresa dice ser dueña de las Lomas de Mangomarca, considerada por Serfor como ecosistema frágil. Agrícola Zárate, una compañía de la familia del exasesor fujimorista Vicente Silva Checa.

Por Álvaro Meneses
Fotos: Juan Zapata

La mañana del 21 de octubre, un día después que el Ejecutivo promulgó la ley que amplía los plazos de titulación sobre terrenos ocupados de manera informal -cuestionada por flexibilizar las normas a favor de los traficantes de tierras-, Ricardo Neyra Aliaga (45), un vecino de San Juan de Lurigancho que reparte sus tiempos entre su trabajo como maestro de construcción civil y la defensa de las Lomas de Mangomarca, recibió una carta notarial de una empresa que intenta tomar posesión del área que precisamente protege.

La carta notarial fue enviada por Nelson Detquizán Inga, un empresario con 43 inmuebles y gerente de la constructora INCIGESA SAC; y le advertía a Ricardo Neyra que lo demandaría por 400 mil dólares si no retira las rejas de la entrada de las lomas y dejaba libre el paso. Es que en reiteradas ocasiones, Nelson Detquizán había intentado entrar a las lomas con materiales de construcción, alegando que el predio le fue vendido en 2018 por Agrícola Zárate, una empresa de la familia del investigado exasesor de Keiko Fujimori, Vicente Silva Checa.

Ricardo Neyra Aliaga (45), uno de los vecinos que defiende las Lomas de Mangomarca de San Juan de Lurigancho.

Agrícola Zárate es una empresa activa desde 1952, siempre bajo el mando de algún miembro de la familia Silva Checa. De 1980 a 1983, el mismo Vicente Silva fue miembro del directorio. Y, actualmente, los dueños de la compañía familiar son sus hermanos Luciano y Francisco Silva Checa, además de su sobrino Bernardo Silva Beck, excandidato a la alcaldía de Lurín por el partido Democracia Directa.

La empresa de los Silva Checa afirma haber adquirido en setiembre de 1959 un predio de 70 hectáreas 890 metros cuadrados en San Juan de Lurigancho. Dentro de esa enorme área de tierra se encuentra una parte de Lomas de Mangomarca, que empieza en la Parcela «N», frente al parque «E» y que continúa por la calle Úngara de la urbanización Mangomarca Alta.

Con la carta notarial en sus manos, el defensor ambiental Ricardo Neyra se preguntó cómo Agrícola Zárate terminó apropiándose de las Lomas de Mangomarca, pese a que el predio es considerado un ecosistema frágil. Wayka siguió la ruta documentaria de esta historia.

Carta notarial enviada por el gerente de INCIGESA SAC, Nelson Detquizán, quien dice haber adquirido Lomas de Mangomarca a través de Agrícola Zárate, empresa familiar de los Silva Checa.


En busca de los papeles perdidos

En 2016, la representante legal de Agrícola Zárate, Luz Robles Vargas, inició un trámite en la Superintendencia Nacional de los Registros Públicos (Sunarp) para cerrar una partida registral que certificaba la existencia legal de las Lomas de Mangomarca. Según Luz Robles, dicha partida “se superpone con el predio inscrito con anterioridad”; es decir, al de Agrícola Zárate.

Según información de la empresa a la que Wayka tuvo acceso, el 9 de mayo de 1972 la resolución suprema N°877-72-VI-DU aprobó la urbanización de Mangomarca Alta y la lotización de las zonas a favor de Agrícola Zárate. Y en 2009, la Municipalidad de San Juan de Lurigancho aprobó la habilitación urbana para uso residencial y autorizó a la empresa el inicio de operaciones en el predio.

Lomas de Mangomarca. Foto: Juan Zapata.


Pese a la documentación existente, en 2018 la Unidad Registral de Sunarp declaró improcedente el pedido de Luz Robles. El análisis técnico elaborado para esta decisión sostuvo que dicho predio no es urbano, que “se trata de un terreno de naturaleza eriaza” y que le pertenece al Estado. Y es que el 17 de mayo de 1988, la Municipalidad de Lima emitió una resolución que declaró eriazo 9 mil 510 metros cuadrados de San Juan de Lurigancho, área donde estaba incluida Lomas de Mangomarca.

Para Luciano Silva Checa, hermano del exasesor fujimorista Vicente Silva Checa y uno de los propietarios de Agrícola Zárate, «el ecosistema frágil Lomas de Mangomarca ha sido delimitado tomando en cuenta el límite de propiedad de la urbanización Mangomarca Alta que es nuestro límite de propiedad, y parte de nuestra titulación matriz». Y precisa que el predio de la empresa y las lomas «se acoplan y complementan perfectamente el uno con el otro, sin la presencia o la existencia de superposiciones».

Luciano Silva Checa, hermano del exasesor fujirmorista Vicente Silva Checa y dueño de Agrícola Zárate, aclaró a Wayka que se ofreció la venta a INCIGESA SAC, pero nunca se concretó.


La controversia por estas tierras protegidas por su calidad de flora y fauna, incluso llegó hasta el Tribunal Constitucional. En junio de 2019, Agrícola Zárate presentó un recurso de agravio que buscó anular el Decreto Supremo 004-85-VC, el mismo que permitió declarar áreas específicas como terrenos eriazos. Finalmente, para los magistrados Manuel Miranda Canales, Carlos Ramos Núñez y Eloy Espinosa-Saldaña, “el recurso (de agravio) carece de especial trascendencia constitucional”, y se declaró improcedente.

Paralelamente, en julio de 2018, la entonces subgerente de Obras Privadas y Habilitaciones Urbanas de la Municipalidad de San Juan de Lurigancho, Juana Munares Flores, aprobó la independización de un “terreno rústico solicitado por Agrícola Zárate”, de 43 mil 817 metros cuadrados. Esto ocurrió durante el periodo del exalcalde Juan Navarro Jiménez, de Alianza Para el Progreso, investigado por los presuntos delitos de enriquecimiento ilícito, lavado de activos y vinculación con el crimen organizado.

Presión bajo la mesa

Los movimientos de la empresa familiar del exasesor fujimorista Vicente Silva Checa para dejar constancia en los papeles que les pertenecería Lomas de Mangomarca, no solo pasaron por Sunarp, la Municipalidad de San Juan de Lurigancho o el Tribunal Constitucional. También llegaron al Congreso de la República, exactamente hasta la puerta del despacho de la excongresista Marisa Glave.

Foto: Juan Zapata

Desde mediados de 2019, la exparlamentaria inició un trabajo en conjunto con organizaciones dedicadas a la defensa de las lomas costeras de Lima. Y en septiembre de ese año, junto a su bancada del Nuevo Perú, Marisa Glave presentó un proyecto de ley que proponía tipificar como delito la afectación a ecosistemas frágiles, como lomas costeras, humedales y bofedales.

Es así que el sobrino de Vicente Silva Checa, Bernando Silva Beck, se presentó en el Congreso como representante de Agrícola Zárate y exigió ser recibido por la excongresista. Fuentes del despacho de Glave informaron a Wayka que Bernardo Silva “trató de convencer que los terrenos de las lomas eran suyas y que lo vendió a INCIGESA, pero que los vecinos que cuidan las lomas no los dejaban desarrollar su proyecto, mostró documentos y planos”.

Bernardo Silva Beck confirmó a Wayka que buscó a las excongresistas Marisa Glave e Indira Huilca para conversar sobre la controversia entre Agrícola Zárate y los defensores de Lomas de Mangomarca.


Uno de los vecinos que ha dedicado su tiempo a proteger este ecosistema frágil que guarda San Juan de Lurigancho fue Ricardo Neyra. “Nosotros nunca hemos dejado pasar a nadie acá, porque nuestro tema es ambiental, casi mi vida ha sido este parque, cuidar estos cerros y mover a mis amigos y vecinos para que se sumen”, relató a Wayka, con una carta notarial en las manos que le advierte una demanda de 400 mil por resguardar las Lomas de Mangomarca.