Por Wilson Chilo.

Mujeres rurales y urbanas del Cusco se reunieron para reflexionar sobre los retos que tienen sus organizaciones y colectivos en la actual coyuntura política. Para ellas, nos encontramos en un escenario, donde va tocar defender los derechos que se han conseguido y agruparse alrededor de agendas que todavía están pendientes en materia de género.

Las lideresas campesinas y activistas feministas del Cusco, avizoran un escenario gris post 28 de julio. Para ellas, está clara la posición conservadora de Keiko Fujimori, marcada por la violación de derechos de mujeres. En el mismo sentido, no hay total confianza en Perú Libre, esto por las posturas de algunos integrantes de su partido y del mismo Pedro Castillo. La carencia de un compromiso claro por parte de las dos organizaciones, genera incertidumbre en las organizaciones de mujeres.

Mucho más gris se torna el próximo Congreso de la República, el cual tiene una amplia mayoría de posturas conservadoras y de fuerzas políticas que han frenado la agenda de género. Siendo la composición congresal: Fuerza Popular (24), Alianza para el Progreso (15), Acción Popular (16), Renovación Popular (13), Podemos Perú (05), Somos Perú (05), Avanza País (07), Juntos por el Perú (05), Partido Morado (03) y Perú Libre con 37 parlamentarios.

Uniendo voces hacia una agenda común de las mujeres

A mediados de mayo, diferentes organizaciones de mujeres de la región del Cusco, se encontraron para ratificar su compromiso y evidenciar que en esta segunda vuelta, no estaba presente temas como la lucha contra la violencia de género, el acceso a la salud sexual y reproductiva, el reconocimiento de los derechos de mujeres, adolescentes y diversidades. También se puso énfasis en la búsqueda de justicia y reparación de las mujeres esterilizadas en contra de su voluntad en la dictadura de Alberto Fujimori. 

A partir de diversas voces se ha expresado la necesidad de organizarse hacia una agenda común para poder afrontar la crisis política, económica y sanitaria por la que atraviesa el país. Este encuentro de mujeres contó con la participación de lideresas de las provincias de Canchis y Quispicanchis, adolescentes, lideresas de locales comunitarios de Salud y representantes de colectivas feministas y LGTBIQ de la ciudad del Cusco.

Foto: Wilson Chilo

Reparación y apoyo a las mujeres víctimas de esterilizaciones 

Según el Registro de Víctimas de las Esterilizaciones Forzadas a diciembre del 2016, hay 1377 mujeres cusqueñas que esperan justicia y una reparación integral. Hasta el momento no hay una respuesta para ellas e incluso, quieren borrar de la historia o cambiarle de nombre a la violación de derechos humanos de la que han sido víctimas.

Las mujeres lideresas del Cusco tuvieron una voz enérgica en apoyo y solidaridad a esta agenda pendiente. Durante la reunión, Gregoria Mamani de la Asociación de Mujeres Afectadas por las Esterilizas Forzadas de Canchis (AMAEF) indicó que sus denuncias están en el Poder Judicial y no se sabe cuál es la situación. Con la voz entrecortada dice que son décadas esperando por justicia: “A nivel de Canchis somos entre 200 a 300 personas que hemos sido abusadas en nuestros derechos, hemos sido forzadas”.

Gregoria Mamani tiene 58 años y cuando fue obligada a esterilizarse tenía solo 33 años, desde ese momento su vida cambió, pero también inició un camino en donde se encontró con varias historias en las que se ve reflejada, tal como ella narra, compañeras que han muerto en las operaciones y que han dejado niños huérfanos que ahora son adolescentes. 

“Lo único que nosotros buscamos es justicia, ya estamos hechas, ósea, ya estamos maltratadas, ya no hay remedio para nosotras, queremos un apoyo de salud, estamos sufriendo, mis compañeras mueren de cáncer”, indica Gregoria.

Foto: Wilson Chilo

La voz de las adolescentes: “El derecho a una educación sexual integral y el acceso al internet”

El encuentro de mujeres lideresas del Cusco se tiñó de juventud y esperanza con la participación de Yurbely y Pilar, ambas vienen cursando el último año de secundaria en la provincia de Quispicanchi y tienen una experiencia importante al fundar la organización, “Adolescentes Defendiendo la Igualdad” (ADI).

Las “ADIS”, como ellas se hacen llamar, expresaron sus preocupaciones y mencionaron que durante la pandemia no han tenido los espacios para acceder a servicios de psicología, obstetricia, consejería en temas de salud sexual y reproductiva. Yuberly resaltó que los jóvenes deben seguir teniendo acceso a los espacios diferenciados de atención integral, iniciativa que es impulsada por el Ministerio de Salud en coordinación con las autoridades escolares y que ahora están cerradas.

Con conocimiento de los derechos que tienen y que han conseguido, ambas estudiantes resaltan la importancia de que las y los jóvenes tengan espacios seguros y libres de violencia, “es necesario que los docentes y personal administrativos sean capacitados con un enfoque de género, una capacitación que también debe llegar a los espacios familiares, en donde podamos conversar con nuestros padres y madres acerca de los derechos sexuales y reproductivos que cada una de nosotras tenemos”, indica Pilar.

En medio de la pandemia, no es el único derecho al que no pueden acceder, en su provincia Quispicanchi también se ha presentado la deserción estudiantil por no contar con servicio de internet o un equipo para acceder al programa “Aprendo en Casa”. Al respecto Yuberly evidencia que el Estado no diferencia la zona urbana con las zonas rurales.

“No es lo mismo que en la ciudad, a nosotras nos entregaron las tablets con la empresa Entel, esta línea no entra en la zona que yo vivo, no tengo acceso a internet, por eso no estoy utilizando la tablet”, Yuberly.  

Equidad de género para las mujeres y hombres trans

Bárbara Ima Sumaq Huaraihua Ocon es de la provincia cusqueña de Calca y es representante de “Las Vírgenes del Sol – Organización Autónoma de Mujeres Trans Andinas de la Región del Cusco”, ella informó que un gran índice de población trans se ve obligada a ejercer la prostitución debido a los obstáculos que enfrentan en los procesos de insersión laboral

“Eso no es una vida normal, no es una vida digna, nosotros también somos peruanas”, enfatiza Bárbara para pedir una ley de equidad de género inclusiva para que las mujeres y hombres trans puedan acceder a salud, educación y a un trabajo digno.  

Foto: Wilson Chilo

Bárbara también marco la importancia de tener ordenanzas regionales y municipales que les reconozcan sus derechos y las protejan de discriminación o violencia cuando están en lugares públicos o en instituciones públicas o privadas.

Una agenda común entre las organizaciones de mujeres, colectivo feministas y LGTBIQ

Otra presencia que enriqueció a este diálogo entre mujeres fue la participación la Asociación de Artesanas, ellas evidenciaron la necesidad de implementar políticas que ayuden a reactivar las economías de las mujeres que ha sido fuertemente afectada por la pandemia.  

Desde Canchis, lideresas campesinas presentaron los problemas por los que atraviesan las mujeres en zonas rurales. Mencionaron que debido a la falta de reconocimiento de sus organizaciones no han podido poner en agenda sus derechos, este aspecto fue resaltado por la Federación Provincial de Mujeres Rurales de Canchis (FEPMURUC). 

Foto: Wilson Chilo

Ante un escenario desfavorable para la lucha por los derechos de las mujeres y las comunidades LGTBIQ, mujeres y diversidades cusqueñas se encuentran empoderas y organizadas para resistir en su lucha. A pesar de que defienden diferentes intereses, han reconocido la lucha de las otras identidades como suyas, apuntando hacia una agenda que incluya las voces de todas.