Saúl Lliuya sobre su demanda a empresa alemana RWE: “Es difícil responsabilizar, pero esperamos lograr un precedente en derecho ambiental”
Por Lucía Castro
Saúl Luciano Lliuya, un guía de montaña de Huaráz, tomó la decisión asumir un difícil reto: denunciar a la que sería una de las empresas más contaminantes del mundo, la energética alemana RWE, por su responsabilidad en el deshielo de los glaciares y el riesgo que esto supone para más de 50.000 habitantes de su ciudad.
Tras una década de empezar esta lucha, el Tribunal Regional Superior de Hamm, en Alemania, realizó la audiencia de este caso histórico, que el 14 de abril – día en que se dará el veredicto final – podría marcar un precedente en la justicia climática.
Lo que sucedió en Alemania
Luego de un largo viaje en Alemania, Saúl contó su experiencia a Waypa.pe sobre la audiencia que tuvo lugar el lunes 17 y el miércoles 19 de marzo de este año. Según el guía de montaña, por parte del Tribunal y el perito que fue enviado a Huaráz para revisar el caso en 2022, las sesiones estuvieron centradas en determinar el nivel de riesgo de inundación para la vivienda de Lliuya debido al crecimiento acelerado de una laguna glaciar cercana.

Durante el juicio, el perito contempló dos posibles escenarios: un oleaje de 7 metros, que no afectaría a la casa de Saul, o un oleaje de hasta 20 metros, que sí podría hacerlo, pero que tiene la probabilidad de ocurrir en un 1% en los próximos 30 años.
Sin embargo, la defensa de Germanwatch, que representa a Lliuya, rechazó varias afirmaciones provinientes del informe realizado, destacando graves «puntos ciegos» en el peritaje, como la subestimación del desprendimiento de rocas por el derretimiento del permafrost (capa de hielo en el suelo de las montañas) y la falta de consideración de otros efectos del cambio climático.
«El apoyo allá, tanto de la organización, como de los abogados, los científicos y los activistas, es impresionante. Hay personas que viven lejos de Huaraz pero están más preocupadas por el cambio climático. En el día de la audiencia, muchos activistas estaban allí apoyándome, aparte de la organización que me respalda».
Aunque el reconocimiento de la responsabilidad directa de RWE sigue siendo un asunto complejo, Lliuya señaló que el caso podría generar un precedente importante. «Es difícil responsabilizar ahora, pero si logramos establecer un precedente, en el futuro otras personas podrán usarlo para exigir justicia a las empresas contaminantes», explicó Lliuya
La abogada que representa al montañista, Roda Verheyen, también destacó que este juicio es pionero en la lucha climática y que su impacto podría ir más allá del caso específico de Lliuya. «Este es un caso sin precedentes, porque nunca antes una empresa había sido demandada por su contribución al cambio climático en otro país. Estamos abriendo un camino legal que podría permitir a otras comunidades afectadas exigir compensaciones a las grandes corporaciones contaminantes», declaró la abogada alemana.
La desglaciación persiste en las montañas de Huaraz
Han pasado 10 años desde que inició la lucha del guía de montaña y en ese transcurso los efectos del cambio climático siguen afectando las montañas del Parque Nacional Huascarán.
«Desde que empecé a trabajar como guía de montaña en 2002, he visto cómo el glaciar ha ido retirándose. El año pasado fue el peor: no hubo acumulación de nieve y el glaciar antiguo quedó expuesto. Lo vemos día a día», relató.
En Huaraz, las preocupaciones de la población varían según la ubicación: en las zonas de riesgo, el temor es el desborde de la laguna, mientras que en otras partes, la inquietud principal es la falta de agua, según revela Lliuya, quién en todo ese contexto se ha mantenido firme en su denuncia.
«Cuando empezamos esta denuncia, teníamos muchas dudas. En Perú, demandar a una empresa grande es peligroso. Nos dijeron que era poco probable que el juez aceptara la demanda. Pero cuando el juez visitó Huaraz y vio la situación, hubo más atención. Mis vecinos y colegas se sorprendieron: ¿cómo era posible demandar a una empresa alemana desde aquí? Hasta ahora, algunos no lo entienden», dice el defensor de los glaciares.
El caso de Lliuya ha trascendido el tribunal, llegando incluso a universidades europeas, donde profesores utilizan su demanda como ejemplo en clases sobre derecho ambiental y justicia climática.
«En Londres, tuve un evento con un grupo de abogados que enseñan en universidades y mencionan este caso con sus alumnos. Ellos tienen mucha esperanza de que este caso va a ser un precedente para que haya otros casos», comentó Lliuya.

En su demanda, Lliuya no solo busca que RWE cambie su modo de producción, sino también una indemnización de 17.000 euros para construir infraestructuras que protejan a Huaraz de una posible avalancha.
No obstante, independientemente del veredicto final, la acción de Saúl Luciano Lliuya ha demostrado que las comunidades afectadas por el cambio climático pueden alzar su voz y demandar a las grandes industrias en la búsqueda de justicia y reparación.