La Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV) programó su inicio de clases para este lunes 3 de agosto, pese a que algunas facultades aún no han completado su plana docente y no se ha capacitado a los alumnos para uso de plataforma virtual.

Lucero Ascarza

Si bien todos los centros educativos iniciaron clases con retraso este año por la pandemia de COVID-19, la Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV) es un caso extremo: sus alumnos llevan medio año sin estudiar. Peor aún, el inicio de clases -programado para el lunes 3 de agosto- se llevaría a cabo con alumnos aún en proceso de matrícula y sin docentes para todas las facultades.

«Es una incertidumbre si vamos a empezar ese día o si van a aplazar un mes más, o si vamos a empezar sin docentes y conforme pasen los días van a ir colocando… no sabemos en verdad», declara una integrante de la Coordinadora Democrática Estudiantil UNFV.

Este colectivo, conformado por delegados de distintas bases y facultades, buscó comunicarse con las autoridades de la Villarreal para encontrar una solución pero no recibieron respuesta. Ahora se organizan para presentar denuncias ante la Sunedu y realizar un plantón el sábado 1 de agosto para exigir educación de calidad.

Una matrícula de tres meses

El primer ciclo académico del año para los alumnos de la UNFV aún no empieza y ya es un completo desorden. «La primera matrícula que fue en el mes de mayo, se dio sin docentes y sin horarios. Solamente se abría el curso», relata una alumna de Derecho.

Por ello, cuando se llevó a cabo el proceso de rectificación hace unas semanas -habiendo pasado tres meses- los estudiantes encontraron cruces entre sus cursos.

«Tenemos una plataforma virtual que es ineficiente… Si no puede registrar una matrícula imposible que podamos llevar una clase virtual. Además, la matrícula de mayo fue completamente improvisada. Y ahora en la rectificación, el sistema no cargaba bien y todavía no hay docentes», comenta el estudiante Rodrigo Noriega.

Los mismos estudiantes coordinan de forma interna para hacer seguimiento de la matrícula. Se llaman y avisan entre ellos si hay alguna falla en el sistema de matrícula virtual SUMWEB de la UNFV para que los demás puedan corregir sus horarios.

«Hemos tenido que pasar uno o dos días de amanecida para que podamos acceder y matricularnos en el sistema», explica la alumna perteneciente a la una integrante de la Coordinadora Democrática Estudiantil UNFV. «Hasta ahora seguimos con el problema de los cupos. A cada rato tenemos que estar cambiándonos de un aula a otra». Además, en muchos casos se matriculan sin saber quién les enseñará, pues aún no hay profesores asignados a sus cursos.

Para cuatro o cinco facultades de la Universidad Villarreal, el proceso de contratación aún no finaliza. En un comunicado, el Tercio Estudiantil de la Facultad de Ciencias Financieras y Contables informó que, de acuerdo a las autoridades, aún quedan 44 plazas disponibles para docentes. Además, que habrían fechas de capacitación durante todo el mes de agosto para ellos. Sin embargo, la fecha de inicio de clases seguía siendo la misma: 3 de agosto.

«A veces pienso que nos están tomando el pelo. Solo nos han dicho que se usará Microsoft Teams pero no nos han dado un reglamento de clases virtuales ni sabemos cómo va a ser la modalidad», lamenta una alumna de Derecho.

Reclaman por cobros y falta de transparencia

En un petitorio dirigido al rector Juan Oswaldo Alfaro Bernedo, más de 70 estudiantes firmaron a favor de la exoneración del pago de la matrícula para pregrado. De acuerdo al Texto Único de Procedimientos Administrativos de la Villarreal, la matrícula incluye el pago por carné universitario, carné de biblioteca, deportes, derecho a laboratorio y otros.

«El consejo universitario aprobó el descuento del 50% de la matrícula pero eso no era el pedido de la mayoría. Porque es el 50% de un total donde nos cobran por servicios que este año no vamos a usar», explica la integrante de la Coordinadora Democrática Estudiantil UNFV.

Debido a la pandemia por COVID-19, muchos estudiantes atraviesan dificultades económicas. Y una de sus principales necesidades para la educación a distancia es la conexión de internet. En ese sentido, la Universidad debía elaborar una lista de alumnos para entregarles un módem o medios tecnológicos que les permita seguir sus clases.

«Pero hasta ahora la universidad no ha hecho público quiénes van a ser los beneficiados. Hicieron una encuesta pero nunca avisaron quiénes van a recibir el módem o con qué empresa han contratado», comenta la alumna citada previamente.

Para el alumno Rodrigo Noriega, es probable que la Universidad Villarreal aún no haya definido la lista de alumnos. Así, quienes no cuenten con equipos o conexión podrían perder el año. A ellos se suman los que no han podido matricularse por el problema con los horarios.

Los perjudicados de siempre

En el gran grupo de estudiantes afectados está el caso del Centro Preuniversitario de la Villarreal (Ceprevi) que no han sido contemplados en el calendario académico de la UNFV. No hay fecha de admisión, tampoco de inicio de clases para ellos. Es decir, habrían perdido la oportunidad de estudiar todo el 2020.

Para estudiantes de la Facultad de Medicina, la demora con la matrícula y el inicio de clases ha significado una pérdida. «Recién se ha aprobado la sustentación virtual. Para los egresados de Medicina no tener sus títulos les ha hecho perder su SERUM y ha impedido que participen en una serie de convocatorias que salieron por el tema del COVID», comenta la integrante de la Coordinadora Democrática Estudiantil UNFV.

Sin embargo, a la fecha no se conoce cómo se llevaría a cabo esas sustentaciones. El alumno Rodrigo Noriega considera que podría ser otra promesa vacía. «Contraloría debería ver esto. Nos han licenciado por las puras en verdad, no contamos con las condiciones básicas», lamenta.