Redacción Wayka
La Defensoría del Pueblo alertó que de los más de 3 millones 591 mil escolares de colegios públicos que carecen de Internet y equipos tecnológicos para desarrollar clases virtuales y que debieron ser incluidos en el programa de cierre de brechas digitales para recibir tablets, el Ministerio de Educación solo pudo beneficiar al 38,2%, es decir 2 millones 215 mil 78 niñas, niños y adolescentes no pudieron continuar sus estudios por falta de presupuesto.
Como se recuerda el año pasado, el Minedu destinó S/ 525 millones para la estrategia digital que debía entregar tablets a estudiantes en situación vulnerable, principalmente de zonas rurales. Pero, el presupuesto no alcanzó para beneficiar ni a la mitad de estudiantes. Con el inicio de la pandemia y el inicio de las clases virtuales, la deserción escolar por la brecha tecnológica se ha recrudecido y ha perjudicado el nivel de enseñanza en todo el país.
El mes pasado, el ministro de Educación, Juan Cadillo, expuso ante la Comisión de Educación del Congreso que debido a esta desigualdad digital, el Perú había retrocedido casi una década en el acceso a educación. De acuerdo a los cálculos del titular del sector educación, el nivel de aprendizaje actual retrocedió hasta el 2012, año en que Perú obtuvo el puntaje más bajo de los países de Latinoamérica en la prueba PISA.
Sin embargo, llama la atención que, a pesar de los indicadores que han llevado al actual Gobierno a declarar la educación en emergencia, el Minedu ha decidido suspender las evaluaciones censales del Minedu, las Direcciones Regionales de Educación y las Unidades de Gestión Educativa Local que permiten identificar las falencias en el sistema educativo y reforzar las políticas educativas a favor de estudiantes que viven en zonas de extrema pobreza.
En cambio, realizarán una Evaluación Virtual de Aprendizajes (EVA) con estudiantes que tengan acceso a un teléfono, tablet, laptop o computadora. Para la Defensoría del Pueblo, este mecanismo excluye a la población escolar que se ha visto afectada por la brecha digital y no estaría cumpliendo con su principal objetivo que es medir la calidad educativa de ese grupo de estudiantes.
“La EVA podría distorsionar una de las finalidades de este tipo de evaluaciones, en la medida que estas buscan, además de medir el nivel de los aprendizajes de la población escolar, identificar las brechas existentes en la población más vulnerable, la misma que estaría quedando excluida de la medición planteada”, alerta la Defensoría.
Teniendo en cuenta que solo un poco más de 1 millón de estudiantes de los 3 millones que no podían cursar clases virtuales en escuelas públicas han podido a acceder al programa de cierre de brecha digital del Minedu, la entidad ha solicitado al Minedu que “evalúe el planteamiento de la EVA 2021, con la finalidad de que se incluya en la medición del logro de aprendizajes a las y los estudiantes que no tienen acceso a medios para recibir educación a distancia o virtual”.
