Redacción Wayka

Los incumplimientos de acuerdos e irregularidades que arrastra la minera Antapaccay (Glencore) en la provincia de Espinar han desatado una manifestación de los comuneros de Alto Huarca que hay terminado por ponerlos en la mira de la Fiscalía de Prevención del Delito.

Los dirigentes Víctor Álvarez Chilo, Beatriz Chullo Chilo, Wiber Llave Umasi, Vidal Chullo Coata y Aníbal Chilo de la comunidad de Alto Huarca, en la provincia de Espinar, de Cusco, serán investigados por el Ministerio Público por entrar hace cuatro días a las instalaciones de la minera Antapaccay como modo de protesta, luego de que la empresa quiebre el diálogo con la comunidad a inicios de este año.

Y es que en Espinar quedan varios problemas socioambientales por resolver. Apenas en febrero de este año, la Fiscalía Ambiental de Cusco aperturó una investigación preliminar contra Antapaccay a raíz de la denuncia presentada por el comunero Rober Córdova Kana, quien responsabilizó a la minera de afectar la crianza de sus camélidos.

“Mis animales beben agua de la quebrada Ccaccamayo, que está ubicada en nuestra propia comunidad, y desde que inició la extensión del proyecto (…) mis animales han empezado a enfermarse, pierden pelaje, nacen con malformaciones, abortan a sus crías o mueren de enfermedades”, declaró Rober en ese entonces.

 Otro pendiente de Antapaccay es la consulta previa en algunos territorios de Espinar, como en la comunidad campesina de Huisa, que denunció a la minera por no consultarles antes de iniciar el proyecto, pese a que, según el Estudio de Impacto Ambiental, las operaciones de la empresa afectarían su territorio ancestral.

Frente a este contexto, la Fiscalía de Prevención del Delito inició las investigaciones contra cinco comuneros por los presuntos delitos contra la seguridad pública, como atentar contra los medios de transporte y comunicación.