A casi dos años del derrame de petróleo de la multinacional española Repsol, los pescadores artesanales de los distritos de Ventanilla, Ancón, Chancay, Santa Rosa y Aucallama señalaron que aún no pueden volver al mar a trabajar y que no todos los afectados han sido resarcidos económicamente.

Por Jair Sarmiento

A casi dos años del derrame de petróleo de la multinacional española Repsol, los pescadores artesanales de los distritos de Ventanilla, Ancón, Chancay, Santa Rosa y Aucallama señalaron que aún no pueden volver al mar a trabajar y que no todos los afectados han sido resarcidos. Así lo manifestaron durante la quinta sesión extraordinaria de la Comisión de Pueblos Andinos del Congreso de la República, en donde también participaron autoridades ediles y la propia compañía.

Luis Diaz Barroso, presidente de la Asociación de Pescadores Artesanales del distrito de Aucallama, fue uno de los primeros en hablar sobre la problemática que hasta ahora aqueja a su sector.

«En la playa El Muerto, una zona pesquera, se presencia hidrocarburo. Hasta la fecha no tenemos conocimiento si se aprobó o no los planes de remediación. ¿Cuándo vamos a volver a pescar? Queremos volver a trabajar. Hay restricciones para pescar. Ha habido compensaciones, pero fue de manera unilateral, nos hemos sometido a lo que la empresa quiere dar. Queremos una compensación justa, serán justas para la empresa, pero no para el pescador», manifestó Díaz Barroso.

Por su parte, Gumersindo Vara Pillco, representante de la Asociación de Comerciantes y Pescadores Unidos por Ancón, explicó que la situación ya no es la misma que antes y que espera a que todo vuelva a como era antes del mayor desastre ecológico en la zona costera de Lima.

«La empresa actualmente pareciere que no quiere remediar. Ahora con el oleaje aflora el crudo. Queremos que quede igual la condición de las playas, no se ha repuesto la arena, ha quedado hueco», comentó Vara Pillco.

Asimismo, señaló que Repsol está solicitando documentos que no poseen comerciantes debido a que laboran en la informalidad, sin embargo, sí poseen fotos que validan su trabajo en verano.

Miguel Núñez, presidente de la Asociación de pescadores, armadores, estibadores artesanales de la playa Bahía Blanca, sostuvo que «la vida del pescador artesanal ya cambió, y no será la misma por mucho tiempo. lo que ellos consideran una compensación no representa nuestra realidad económica, solo es el 30%».

Virgilio Crisando Maglorio, presidente del Frente Único de Defensa de Mototaxistas de Pachacútec-Ventanilla, apuntó que la mototaxi es una movilidad típica en la zona impactada por el crudo. «Somos el camino más rápido para pescadores, comerciantes y ambulantes. Yo soy mototaxista desde el 2000, y desde ahí he sufrido bastante, pero se mejoró, trabajábamos más o menos bien, pero con este derrame nos hemos sentido perjudicados», agregó.

En esa línea, las autoridades municipales de Aucallama, Chancay y Ventanilla respaldaron las demandas de los pescadores artesanales y señalaron que no se han resarcido los daños y no se cumple con incluir a todos los afectados en la lista de compensación. También dijeron que no se han implementado los planes de rehabilitación hasta la fecha.

Por el contrario, Luis Vásquez Madueño, vicepresidente de la Refinería La Pampilla y director de comunicaciones y relaciones institucionales de Repsol, señaló que se ha compensado «al 98% del censo de afectados elaborado por el gobierno».

Durante su presentación, la compañía persistió en que el volumen de petróleo derramado era de 10.396 barriles. Sine embargo, es necesario mencionar que en enero del 2022, el Ministerio del Ambiente desmintió a la empresa sobre esta cifra y precisó que en realidad fueron 11.900 barriles de crudo.

Repsol también volvió a mencionar los estudios que enviaron a hacer para afirmar que las playas son accesibles y están libres de hidrocarburo. Sobre este punto es necesario recordar cuando la exviceministra de Gestión Ambiental, Giuliana Becerra, contradijo esta información y declaró que aún existía presencia de hidrocarburos en la zona impactada. “No es la empresa la que tiene que dar la información, sino el Estado a través de sus organismos técnicos competentes”, acotó.

Según Repsol, en la actualidad hay 124 hallazgos de hidrocarburos que no corresponden al crudo derramado el 15 de enero del 2022. «Proviene del mal uso de combustible de embarcaciones que tiran al mar, o algún desagüe industrial, tenemos también algunas potenciales sabotajes, gente que ha arrojado combustible o aceite usado o brea o grasa», señaló Vásquez Madueño.

Para finalizar, la congresista y presidenta de la Comisión de Pueblos, Ruth Luque, informó que presentarán un informe producto del desarrollo de las cuatro sesiones que ha habido alrededor del control político respecto al tema de Repsol.