Después de un proceso de casi dos años, hoy se realizó la audiencia que decidirá si se mantiene el enfoque de género en el Currículo Escolar. Luego de escuchar los argumentos de ambas partes, el fallo final estará en manos del magistrado Omar Toledo Toribio.
En el exterior del Palacio de Justicia, se vivía el caos. Colectivos religiosos agredían a organizaciones civiles a favor del enfoque de género, obligándolos a retirarse.
Mientras tanto, al interior del edificio, el juez dirimente Toledo Toribio daba por iniciada la audiencia. “Teniendo en cuenta la trascendencia de la causa, este juez supremo considera necesario y conveniente dar 10 minutos a cada parte”, determinó.
El abogado Alberto Gonzáles Cáceres, representante del colectivo Padres en Acción (PEA), presentó sus argumentos en contra del Currículo Escolar aprobado por el Ministerio de Educación (Minedu).
Por el lado del Estado, Sofía Salinas Cruz, procuradora pública adjunta del Ministerio de Justicia, fue la encargada de defender la posición del Minedu a favor del enfoque de género en la educación.
Según declaró el procurador público Luis Huerta, Omar Toledo tiene un plazo de 30 días para emitir su voto luego de escuchar los informes de ambas partes.
Estos fueron algunos de los principales argumentos de la audiencia:
«Un pensamiento único»
Alberto Gonzáles acusó al Minedu de querer imponer “un pensamiento único y totalitario” sobre la sexualidad y de «doctrinas ajenas a las costumbres jurídicas y culturales de nuestro país», afirmando que la entidad estatal solo está “siguiendo consignas señaladas por entes externos”.
Además, citó un texto del Minedu donde se explica la identidad de género como el reconocimiento de uno mismo a partir de un componente biológico y otro psicológico, el trato asignado por el entorno.
El abogado calificó esa definición como disforia; es decir, una diferencia de carácter patológico entre el sexo y la identidad asumida por una persona. «¿Eso queremos para nuestros hijos?», acotó.
Educación por la igualdad
La procuradora Sofía Salinas resaltó que el verdadero centro de la controversia es la necesidad de un enfoque de género en la educación, por ser una herramienta para erradicar prejuicios.
El objetivo del Currículo, según explicó la abogada, sería afirmar la «libertad de hombres y mujeres de escapar de los roles tradicionalmente asignados, que generan desigualdad de las mujeres en nuestra sociedad». Además, se refirió a las agresiones y violencias que se viven en el ámbito escolar.
Pero para el representante de Padres en Acción, no es eso lo que está en debate. «Evidentemente, solo alguien que tenga problemas de orden mental podría avalar la violencia contra la mujer, o también el hombre», aseguró.
Sobre el derecho a consulta
Alberto Gonzáles afirmó que uno de los puntos más importantes de su demanda es que no se habría consultado con los padres de familia los contenidos del Currículo, faltando a su derecho a decidir sobre la educación de sus hijos.
En respuesta, Sofía Salinas citó lo explicado por el magistrado Pedro Cartolín, primer juez dirimente en el caso que «la participación de los padres en el proceso educativo se restringe a la relación que establecen los padres con el centro educativo y se canaliza a través de la APAFA».
Además, reafirmó que temáticas referidas a derechos fundamentales no podían ser materia de consulta, y que la participación de la sociedad civil en la elaboración del Currículo se había efectuado con las opiniones brindadas por el Consejo Nacional de Educación.
Ahora, con tres votos a favor de la posición del Minedu y dos a favor del colectivo Padres en Acción, todo queda en manos del juez supremo Omar Toledo.