El colectivo «Marcha del Orgullo» señaló que el Poder Legislativo tiene demandas pendientes como la ley de identidad de género, la ley contra los crímenes de odio y el matrimonio igualitario.

Redacción Wayka / Foto: Juan Zapata

Colectivos y activistas acudieron a la Plaza Bolívar del Congreso de la República, en un evento previo a la «Marcha del Orgullo» que se realizará en diversas partes del país y el mundo este sábado 29 de junio.

Estuvieron presentes las congresistas de Nuevo Perú, Indira Huilca y Marisa Glave, además de los congresistas Alberto de Belaunde, Gino Costa y Guido Lombardi de la Bancada Liberal, y la vicepresidenta Mercedes Aráoz.

Diversos representantes de la comunidad LGBTI (lesbianas, gays, trans, bisexuales e intersex), manifestaron la necesidad de que el Poder Legislativo apruebe los proyectos de ley pendientes: la ley de la identidad de género, la ley contra los crímenes de odio y el matrimonio igualitario.

Inicialmente, el colectivo «Marcha del Orgullo» fue impedido para ingresar a la Plaza Bolívar por la Policía Nacional, pese a contar con autorización del presidente del Congreso, Daniel Salaverry.

Sin embargo, todo quedó resuelto cuando la congresista Marisa Glave pasó al comandante a cargo una llamada directa del ministro del Interior, Carlos Morán.

Marcha del Orgullo
Foto: Juan Zapata.

Discursos con orgullo

«Hay algunos colegas que no quieren que estemos aquí el día de hoy, colegas que se sienten amenazados por los colores, la alegría, la diversidad. Eso no evitará que nosotros nos sigamos manifestando, que sigamos existiendo», expresó el congresista Alberto de Belaunde.

El activista Jorge Apolaya resaltó el carácter histórico de este evento, recordando que en 1978 un grupo de travestis acudió al Congreso para exigir que la Constitución los proteja.

Foto: Graciela Tiburcio.

«Me parece importante recordarlas porque ellas solo pudieron llegar hasta las rejas. Ahora estamos en esta plaza y no la vamos a dejar […] Quisieramos pasar de esta plaza al legislativo, a defender nuestras demandas», manifestó.

Se mencionó también la existencia de una «fuerza de choque conservadora» que busca frenar las demandas de la población LGBTI e invisibilizarlas.